Después de más de un año con una actividad muy limitada en todo el mundo, ya fuesen carreras o cualquier tipo de evento interesante, el Team Classic Suzuki ha tenido tiempo para realizar una creación única y ahora la ha presentado.
Se trata de una Suzuki Katana basada en una Superbike del mundial, la GSX-R1000 2008. Una particular construcción que quizás nunca hubiese sido llevada a cabo sin la existencia de el coronavirus o un bloqueo de tipo mundial con medio planeta en casa sin saber que hacer.
Suzuki crea una Katana de calle con base de Superbike
Como hemos visto, el confinamiento ha desatado la imaginación de algunos moteros, provocando una subida en el precio de motos clásicas. Algunas de ellas se utilizaron como inversión en Gran Bretaña o el aluvión de modelos especiales "post pandemia".
La historia de amor ya existía entre el Team Classic Suzuki y la Katana, ya que hace un tiempo preparó una versión de carreras y corrió con una Katana en el Campeonato Europeo de Resistencia Clásica, obteniendo una victoria en en Oschersleben.
Esta vez, el Team Classic Suzuki se ha dedicado a un proyecto para hacer una Katana de calle muy distinta de la anterior. En el centro del proyecto hay un motor con especificaciones de Superbike 2008, proveniente de una Alstare GSX-R1000, renovado por Nathan Colombi del Team Classic Suzuki.
Este aparato con una potencia de alrededor de 200 CV a la rueda, respira a través de los colectores originales de las Superbikes de Alstare, terminados con una cola Racefit. La refrigeración del conjunto se deja de la mano de un radiador proveniente de fábrica y un enfriador de aceite con tubos de aluminio. La electrónica viene con un kit Yoshimura EM Pro.
Este corazón está alojado en un chasis de la misma Superbike Alstare. Pero la parte más especial está en el basculante, con un gran tamaño y un subchasis auxiliar personalizado de Alpha Performance, diseñados ambos para configurar una suspensión trasera de doble amortiguador en un chasis no diseñado para ello, y de esta forma rendir homenaje a la Katana original con todas las de la ley. La suspensión tanto delante como detrás es cortesía de Öhlins.
Las llantas son unas ligeras Dymag CH3 que mantienen un estilo clásico, para montar discos Brembo, con pinzas Stylema y pastillas también de la firma italiana. El detalle de la pinza trasera es muy interesante ya que queda invisible ya que se esconde entre el basculante y la rueda por ello es difícil de ver.
El pequeño carenado superior es una unidad original de antiguo stock, que se ha ensanchado 25,4 cm y se ha modificado para adaptarse como un guante a su nueva montura. Se utilizaron los moldes originales para crear paneles de carbono que le dan un toque más de carreras. Los accesorios y tornillería ligera son cortesía de Racefastener.
También se ha diseñado un nuevo asiento ex profeso gracias al proveedor italiano Race Seats. Esta especial Katana tiene un clasico acabado gris metalizado a imagen de su inspiración con el logo de la Katana tradicional y el logorojo de Suzuki. No será fácil verla o adquirirla ya que se perfila como un ejercicio de mecanica y solo existe esta unidad preparada, cosa que la hace aún más valiosa.
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