Tras una fuerte caída en la etapa de ayer, que en un principio parecía sin consecuencias ya que consiguió terminar sin problemas y hasta ganar, Joan Barreda sufría tanto dolor que incluso pensaba que se había roto la rodilla y "veía complicado poder seguir" compitiendo en este Dakar 2018.
Al comprobar que no era capaz de apoyar izquierda tuvo que ser atendido en el centro médico donde le realizaron diversas pruebas en las que vieron que tenía bastante líquido en la rodilla y tenía el ligamento externo bastante inestable.
Continúa en carrera tras el paso por el cuarto waypoint
La opción que barajaban ayer en el equipo y el propio piloto para poder seguir compitiendo era el ponerle un vendaje que le estabilizase la rodilla para que no tuviera tanto dolor y eso han hecho. Joan Barreda admitía que no le preocupaban tanto las zonas rápidas, pero sí las zonas técnicas, con arena o con curvas a la izquierda.
Ha cedido bastante tiempo en los tres primeros waypoints ( WP1 1 minutos y 32 segundos, WP2 3 minutos y 5 segundos, WP3 10 minutos y 46 segundos) pero a partir del cuarto parece que está consiguiendo no seguir perdiendo y de momento se mantiene.
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