Toda marca importante que se precie debería tener su propio museo, un lugar donde poder exhibir los modelos más interesantes que ha creado, o las motos que le han dado más victorias a lo largo de su historia.
Por eso, teníamos ganas de hablar de más museos de motos, al igual que hemos hecho con Ducati o con Honda. KTM anuncia que abrirá su Motohall a partir del 11 de mayo en su sede de Austria, en Mattighofen.
KTM para toda la familia
Se nota que la marca austríaca del 'ready to race' ha puesto ganas para que su edificio salga adelante y para que resulte atractivo a todos los miembros de la familia. Son nada menos que 10.000 metros cuadrados los disponibles para albergar no solo la exposición de motos de KTM, sino también un aparcamiento subterráneo, un restaurante, una tienda, un taller y un espacio para charlas.
El plato fuerte de todo el espacio son los tres recorridos que ofrece la marca. En uno de ellos se ve todo el proceso de creación de una de estas motos austríacas: desde que se empieza a plasmar la idea en un boceto hasta que finalmente se fabrica. A través de dibujos y vídeos podremos ver todos estos pasos.
El segundo recorrido está enfocado a los usuarios, a los que compran las motos de KTM para el día a día, es decir, para las motos de calle sobre todo. En el tercer recorrido, ubicado en una curva especialmente ideada del edificio, hay 70 motos de carretera y de campo que muestran la historia deportiva de la marca austríaca. Algunos de esos logros se explican a través de vídeos e imágenes en 360 grados.
Para los amantes de la mecánica y de las tripas de las motos, hay un espacio donde se pueden ver las transformaciones y restauraciones que les hacen a las máquinas de dos ruedas. Los visitantes podrán ver cómo trabajan los mecánicos con impresoras 3D y plotters láser.
El edificio se lo han encargado a Atelir Brückner, expertos en escenografía que han puesto especial detalle en cómo mostrar la esencia deportiva de KTM a través de la iluminación y la puesta en escena, con la mezcla de los maniquíes vestidos con merchandising de la marca junto a las motos de la fábrica austríaca.
El espacio, que tiene además de las 130 plazas subterráneas un aparcamiento para autobuses y una zona de aparcamiento para los moteros, se puede visitar de martes a domingo desde las 9 horas de la mañana hasta las 18 horas de la tarde.
La entrada es gratuita para los menores de 14 años. Para los adultos el coste es de 10 euros. Si son grupos familiares el acceso sale a 25 euros. Puede haber grupos de hasta 20 personas por un precio de 90 euros y la visita guiada es de 5 euros. Y no lo olvidemos, hasta el 11 de mayo el Motohall no estará abierto.