En un pueblo en el corazón de Reino Unido, Newcastle-under-Lyme, los residentes están cansado del ruido y las molestias de motos y coche, especialmente durante las noches. Están tan cansados que han propuesto prohibir cualquier tipo de recorrido en el que participen más de dos personas. Y no es broma.
Si no lo cumples, te va a caer un multazo. Aunque todo este embrollo tiene una moraleja: pagan justos por pecadores, porque el municipio está cansado de ciertas actitudes sobre ruedas.
"Un impacto negativo en el bienestar de los residentes"
Según el consejo municipal del municipio de unos 75.000 habitantes, han propuesto una Orden de Protección de Espacios Públicos. Básicamente, es una ordenanza que prohibirá a los coches y motos viajar o circular en convoyes de más de dos vehículos, así como reunirse en espacios públicos.
Este pueblo no quiere vehículos que molesten en sus espacios públicos. Han dicho que van a prohibir viajes en moto en grupo y quedadas que involucren a dos o más vehículos. Música a todo volumen, escapes ruidosos, conducción temeraria, derrapes... El cóctel nocturno perfecto para molestar acabará en prohibición.
Pero, ¿cuál es el razonamiento? Según Motorcycle News, un medio nacional, el ayuntamiento local dice que este tipo de reuniones y paseos en moto "han causado un impacto negativo en el bienestar de los residentes". Tanto que han optado por prohibirlo.
Las declaraciones evidencian un malestar generalizado: "Los residentes, visitantes y empresas nos han dicho repetidamente, y a la policía de Staffordshire, que el tráfico en lugares públicos les está causando importantes trastornos y sufrimientos con música a todo volumen, escapes ruidosos, conducción peligrosa... A menudo a altas horas de la noche. Está claro que esta actividad está teniendo un impacto perjudicial en la calidad de vida de las personas, por lo que queremos ponerle fin. Lo adoptaremos a final de año".
Por el momento solo recogen una "pequeña multa", y hasta recogen una serie de salvedades a esta norma, como eventos benéficos, paseos en bicicleta y hasta permisos para permitir viajes en grupo por el pueblo.