SYM Symphony ST 125, prueba (conducción, galería y ficha técnica)

Tal y como os comentábamos ayer, Barcelona nos recibió con un desapacible día pasado por agua en el día en el que teníamos que poner a prueba la SYM Symphony ST 125. Uno es chico del norte y el agua no lo amedrenta pero otros compañeros de profesión son como gatos, y huyen del líquido elemento a las primeras de cambio. Pero es que si queremos extraer conclusiones válidas, asfalto mojado en ciudad a hora punta no es el mejor escenario.

Aun así nos equipamos completamente para salir del lugar de reunión en el que nos encontrábamos y así recorrer unos kilómetros por la Ciudad Condal en un primer contacto que esperamos repetir en otra ocasión y así completar nuestras primeras percepciones que tampoco es que hayan sido pocas.

SYM Symphony ST 125, "singing in the rain"

Con la canción de soniquete en nuestra cabeza, la cual íbamos tarareando debajo del casco, nos colocamos a los mandos de la SYM Symphony ST 125. Primeros detalles ergonómicos que pudimos comprobar: una altura del asiento un poco alta aunque la estrechez no debe ser un problema para los más bajos que quieran un rueda alta, plataforma plana ubicada a una altura óptima, distancia entra las rodillas y el escudo frontal/manillar más que suficiente para gente de metro noventa y un asiento curiosamente duro respecto a lo que estamos acostumbrados en un scooter. Más que duro deberíamos decir firme en cuanto a su tacto.

Giramos la llave de contacto (que está acodada para poder plegarse una vez puesta en el clausor y que ocupe menos) y el nuevo propulsor cobra vida con muy poca rumorosidad y aun menos vibraciones. Jugueteamos con el cuadro en busca de la configuración que más nos complace y elegimos la del tacómetro señalado con la aguja y el velocímetro digital. Su visibilidad, perfecta en horario nocturno, pero no tan buena por el día aunque como dijimos, ya están en búsqueda de la solución así que nos podemos olvidar del detalle.

Teniendo en cuenta que es una 125 y que apenas tenían kilómetros, hay que destacar que no estaban sueltas. Aun así el tacto del gas me recordó al de la Suzuki Burgman 125, con un recorrido bastante largo hasta que la moto arranca desde parado (se aprecia un tarado del variador que no busca aceleraciones rápidas) pero que permite ir a velocidad muy reducida de forma suave como la mantequilla. Una vez transcurridos una decena de metros sí aumenta el brío con el que acelera la SYM Symphony ST 125 hasta superados los 70 km/h donde el empuje disminuye hasta su velocidad máxima cifrada en unos 100 km/h pero que no pudimos comprobar.

El tacto de los frenos es más que correcto. Apreciamos un buen mordiente delante gracias a su sobredimensionado disco delantero de 260 mm y un trasero eficiente que permite utilizarlo como apoyo sin que bloquee a la primera de cambio. En curva nos dio buenas sensaciones aunque no lo pudimos llevar al límite. Quizás la altura la suelo puede ser un poco escasa ya que la pata lateral llegaba a estar muy cerca del suelo en inclinaciones en mojado por lo que en seco nos tememos que no será demasiado difícil rozar con ella.

Pero si damos un par de pasos hacia atrás y vemos en conjunto la nueva SYM Symphony ST 125 no tenemos ninguna duda de que es mucho mejor que su antecesora. Es mejor en acabados, calidad, motor, suspensiones, equipamiento... en definitiva, en todo. Y si antes nos parecía que tenía un precio de escándalo (la SYM Symphony S 125 se vende por 1.849 € y la SYM Symphony SR Top 125 por 1.899 €), el precio de la SYM Symphony ST 125 por 2.199 euros en promoción con cinco años de garantía nos parece realmente de escándalo por todo lo que hemos visto que ofrece. Está disponible en tres colores: blanco, negro y un elegante bronce con asiento marrón imitando el cuero muy elegante y que podéis ver en las fotos.

Lamentablemente no podemos emitir nuestra valoración al haber sido una toma de contacto muy corta. No obstante si os mostramos la ficha técnica con sus características principales.

SYM Symphony ST 125 - Ficha técnica

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