Hacer offroad con una mini Honda Monkey, ¿qué puede salir mal? Pues hoy lo vamos a comprobar de primera mano gracias a un youtuber que ha puesto a prueba a una de las motos más longevas y vendidas de la historia de Honda.
Sorprende porque no es una moto cuyo objetivo sea especialmente el offroad. Pero lo que más sorprende no es eso, sino que con su poca potencia, pero poco peso y mucha habilidad del piloto es capaz puede ser más capaz fuera de la carretera de lo que uno podría llegar a esperar.
9 CV y 4.000 euros para disfrutar del offroad más... Peculiar
Pequeña pero matona. Podría ser la mejor definición que cuadre con la Honda Monkey, una moto pequeña, pero divertida a raudales. Manillares altos, ruedas en miniatura, motor funcional... Es probablemente una de las motos más representativas de la casa tokiota, y que más historia tiene.
Pues alguien con demasiado tiempo libre ha decidido ponerla a prueba hasta un límite que pocos han descubierto: el offroad.
Si bien no va a un lugar tan duro como Erzbergrodeo, y que todos los amantes de esta disciplina conocen por acoger la competición más prestigiosa del calendario de hard enduro, donde participan más de 1500 pilotos, nuestro protagonista de hoy acude a unas montañas que tampoco son precisamente fáciles. Offroad en estado puro. Bueno, casi.
El lugar ya podemos intuir que no es precisamente sencillo para una pequeña moto como la Monkey. Además, está de serie. Eso significa que rinde sus reglamentarios 9,4 CV a 6.500 vueltas y un par máximo de 11 Nm a 5.500 rpm. Ni siquiera ha tocado la parte ciclo; las únicas mejoras son visuales, como algún guardamanos, protectores, etcétera.
Pues con sus enanas ruedas de 12 pulgadas la Monkey no se achanta ante los terrenos. Tampoco su piloto, nadie conocido pero que parece tener bastante experiencia en esto del off, aunque tampoco creas que va muy bien equipado en vaqueros y ropa de calle.
Sin embargo, ahí que va la decidida minimoto de Honda. Siete minutos llenos de emoción y cuestas empinadas con bastantes grados de inclinación, caminos pedregosos llenos de desniveles y colinas con cierta pendiente a vista de dron.