En una hipotética quiniela, existe poca probabilidad de que alguien no conozca a Michael Jackson. El Rey del Pop ha hecho mover el esqueleto a muchas generaciones, y lo seguirá haciendo. Pero si en esa quiniela te dijeran que al eterno cantante le gustaban las motos, ¿qué dirías?
Sí. A Michael Jackson le gustaban las motos. Además de un anuncio de Suzuki, casualmente, tuvo una moto de la misma marca. Una muy pero que muy especial con la que todo motorista de los ochenta y noventa hubiese soñado.
Kevin Schwantz acudió al concierto de Michael Jackson
En 1988, el "Rey del Pop", Michael Jackson, vivía un momento estelar de su carrera, cautivando a millones en todo el mundo con su música y sus impresionantes espectáculos. Lo raro sería haberlo asociado al motociclismo de una manera u otra... Pero sí. Algo tenía que ver, concretamente gracias a una moto muy llamativa que tuvo en su garaje, y de la cual se desconoce su paradero.
Gary Taylor, un apasionado fanático de las motos y responsable del equipo Suzuki en el Mundial de 500 y MotoGP por aquel entonces, decidió llevar una Suzuki RG500 hasta Italia, donde Michael estaba ofreciendo conciertos como parte de su gira. Llegaron a escuchar que era un gran fanático de las dos ruedas, y le ofrecieron una exclusivísima moto que sería una publicidad para toda la vida.
¿Quién no querría al Rey del Pop subido a una Suzuki RG500? Pues eso. Se la acabaron regalando cuando terminó aquel concierto en Italia. Schwantz, leyenda de las carreras, y Rob McElnea, también figura destacada del motociclismo, asistieron al concierto de apertura de Jackson en Roma entre las fechas de competición. La fusión entre música y motociclismo fue breve pero memorable.
Michael Jackson recibió el 22 de mayo de 1988-Roma, durante su primera gira en solitario (Bad World Tour), un regalito de Gary Taylor.... Pepsi-Suzuki RG500. 🎵-🏍. pic.twitter.com/7zXF4s5k5T
— Antonio Ramos (@AntonioRamosGP) July 27, 2020
Lo acabaron consiguiendo, y de ello existen un par de fotos de Michael Jackson montado sobre la moto que pasarían a la posteridad. Sin embargo, el misterio continúa hoy en día, porque no se sabe qué llegó a ser jamás de esa moto; ni siquiera tras su muerte.
La Suzuki RG500 que se llevó el cantante fue probablemente le más laureada de toda la historia de la marca japonesa. Casi su vigencia (de 1974 a 1982), se explica solo. Con 50 victorias bajo su palmarés, y las de calle eran prácticamente idénticas a las de competición. Dependiendo del año y modelo, la Suzuki tenía cerca de 100 CV, impulsados pro un tetracilíndrico de dos tiempos.