A finales de 2018 muchos lamentaron la salida del mercado de la Suzuki GSX-R1300 Hayabusa, una moto a la que la normativa Euro4 puso punto y final y un auténtico icono de las motos deportivas de producción en serie que quizá vuelva en un futuro próximo, con la necesaria vuelta de tuerca que haga posible su homologación.
De hecho hay algunas patentes de Suzuki que han dado esperanzas de que esto suceda pero mientras tanto poco más se puede hacer que recurrir al mercado de segunda mano. En este caso hablamos de una unidad muy especial, que supera de lejos las prestaciones que tenía esta moto de fábrica y con la que Becci Ellis rodó a 425 km/h, convirtiéndose en la mujer más rápida del mundo a lomos de una moto.
Esta Suzuki Hayabusa de 660 CV preparada por BDR Performance cuesta 35.000 euros
A finales del siglo XX y principios del XXI la obsesión por tener la moto de serie más rápida del mundo llevó a los fabricantes a crear máquinas como la Honda CBR1100XX, la Kawasaki ZZR1400 o la propia Suzuki Hayabusa, cuyo último modelo fue el denominado GSX-R1300, que se puso a la venta en 2013 y que permaneció en los concesionarios hasta hace algo más de dos años.
De hecho, en el año 2000 se estableció un acuerdo entre las principales marcas de motos de Europa para limitar electrónicamente estos vehículos a 300 km/h, por el peligro que entrañaban en manos inexpertas y porque estaban empezando a ser objeto de crítica de distintos colectivos.
Quizá eso fue lo que llevó a que se preparasen unidades como esta que se ha puesto a la venta, una creación del ingeniero de BDR Performance Mick Ellis, quien dotó a la moto de todo lo necesario para que rindiera más de 660 CV, frente a los 197 que homologa de serie el propulsor Gen 1 de 1340 cc, que sigue siendo el corazón de esta unidad.
Este motor de cuatro cilindros de refrigeración líquida cuenta con la ayuda de un turbo Garrett GT35 y de unos inyectores firmados por Bosch de 1000 cc que se encargan de alimentar la mezcla con la gasolina de 119 octanos que utiliza esta moto. Y son solo algunos de los cambios de los que se ha beneficiado esta pieza que ahora ha puesto a la venta su propietario, el mismísimo Mick Ellis.
Atrás queda ya el recuerdo del récord de velocidad en moto que consiguió su mujer Becci Ellis en 2014, una hazaña cifrada en 425 km/h que casi le cuesta la vida en 2015, mientras intentaba romper su propio récord. Ese año perdió el control de la máquina cuando el cuentakilómetros marcaba unos 409 km/h, lo que hizo que se fuera a la hierba y que atravesara algo más de 400 metros antes de salir despedida de la moto.
La suerte hizo que aquello solo le costara poco más que un tobillo roto, algunas magulladuras por el cuerpo y que se desmayara debido al susto y al golpe recibido. Su buena fortuna le permitió vivir para contarlo pero parece que ha llegado el momento de despedirse de esta Hayabusa. Su precio, 34.262 euros, negociables...
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