Cuando eres pequeño y ves la bola del mundo, te imaginas que los australianos tiene que estar cabeza abajo, pues están al otro lado del globo, justo en la parte opuesta a nosotros. Y desde allí llega Vozz Helmet, un casco completamente revolucionario y que además rompe con todo lo establecido ya que se trata de un modelo modular pero que se abre por la parte trasera en vez de por la delantera.
Los cascos no han sufrido evolución en los últimos años, a excepción de pequeñas ideas que no se han popularizado, como el casco con airbag o el 6D Helmet con su calota interna revolucionaria. Más bien los derroteros van por conseguir cascos que se puedan interconectar con otros dispositivos o cuenten con sistemas realidad aumentada.
El Vozz Helmet consigue con su particular diseño, prescindir por un lado de la correa inferior de sujeción y por otro, permitir a las asistencias una rápida extracción del mismo sin que el motorista sufra ningún tipo de lesión.
Para ello han diseñado un casco que se abre por la parte posterior, pivotando hacia arriba. De esta forma puede ser mucho más cerrado por la parte inferior y, con ello, prescindir de la tradicional correa para sujetarlo. De una forma muy similar a los cascos modulares, mediante sendos pulsadores se liberan las sujeciones para poder colocarlo y quitarlo de la cabeza, tal y como podemos ver en el siguiente vídeo.
Las almohadillas del interior están disponibles en múltiples tamaños, tanto las laterales como las de la mentonera, con el fin de adaptarse a todas las fisonomías. La ventaja más evidente es que se eliminan prácticamente las molestas corrientes de aire que entran por la parte inferior del casco.
Además impide que el usuario abroche incorrectamente el casco y que este, en un impacto, se salga de la cabeza. Os puede parecer mentira pero os aseguro que muchísima gente se lo coloca y abrocha mal. Impartiendo cursos de conducción de motocicletas, el 90% de los alumnos llevan el casco abrochado incorrectamente y a todos ellos se lo quitamos sin desabrochar la correa con un simple golpe en la parte superior.
Por otro lado está el tema de la** seguridad en caso de impacto**. Mediante la extracción de una tapa y un tornillo que se encuentra detrás de ésta, el casco se divide en dos partes de tal manera que los equipos médicos lo pueden retirar de una forma muy sencilla y sin que el motorista pueda sufrir daños en su columna. Este vídeo lo explica perfectamente.
No hay mucha más información al respecto más allá de que de momento se comercializa en Australia aunque la intención es exportarlo a más países. Disponen de seis tallas diferentes gracias al uso de tres calotas diferentes y, según se puede ver en la web, homologación ECE y DOT.
En cuanto a la protección frente a un impacto, me imagino que será similar a la de un casco convertible, la cual suele ser bastante alta siempre y cuando el ajuste entre las dos partes sea correcto. No os podemos contar mucho más sobre ello. Quizás el hecho de que la apertura sea cerca de los oídos puede provocar más ruido del esperado. Pero no siempre pues como hemos visto, el modular de Schuberth, el C3 Pro es más silencioso que el integral SR1.
Por último, el diseño frontal se ha hecho de tal manera que en marcha, no tienda a irse hacia los lados, algo que es muy incómodo en cualquier casco pero que en este caso y sin la correa inferior podría ser más acusado. Lo han denominado DVS o Directional Visor Stability.
Podéis conocer un poco mejor el Vozz Helmet en el siguiente enlace.
Más información | Vozz Helmet