En España se habla popular y coloquialmente del "afán recaudatorio de la DGT" por el número de radares y armas que utilizan para cazar los excesos de velocidad. En Reino Unido se las gastan todavía más: están armando a jubilados con pistolas radar.
Y no es broma. La policía lleva reclutando a los jubilados desde 2015 con el fin de cazar los excesos de velocidad. Los equipan con una chaqueta fluorescente y una pistola radar para cazar motos y coches en algunas zonas del territorio.
En un pueblo de 5.947 habitantes cazaron a 130.000 conductores en una sola semana
No es una medida nueva, pero sí impopular. Por ese motivo va y viene constantemente en las distintas zonas. A día de hoy sigue funcionando, y merece la pena conocerla en profundidad.
Son los llamados 'Community Speedwatch', una iniciativa a nivel nacional que anima a los miembros de comunidades locales a hacer de agentes de radar. Los equipan con una chaqueta de alta visibilidad y una pistola radar, y a cazar infractores en zonas de 30, 50 o 60 kilómetros por hora.
La mayoría de estos voluntarios son jubilados con tiempo libre, que es lo que interesa a las autoridades para tener cierta regularidad, pero no es restrictivo. Es decir, que cualquier vecino se puede apuntar al programa de voluntariado.
El método de funcionamiento es bastante simple. Van por parejas, uno dispara la pistola radar y otro hace las veces de testigo. Una vez cazado el exceso, informan a la policía, que envía una carta (que no multa) a los infractores. Tres avisos o cartas y la policía "se interesará mucho" por dicho criminal.
We're going to be on the telly! Tune into @BBCTheOneShow 7pm TONIGHT to hear more about #CommunitySpeedWatch https://t.co/jn2uXxTru5 pic.twitter.com/YSk7HP8Te6
— Bristol Community Speedwatch (@Bristol_CSW) October 30, 2018
En la zona del Norte de Gales la policía contrata principalmente jubilados y madres, pero también en Cambridgeshire, donde tuvieron que descartar la idea por la oposición de un grupo de vecinos bastante enfadados, aunque en su página web siguen funcionando y reclutando gente.
En ciertas zonas de Reino Unido tienen un serio problema con los moteros infractores. Como en North Yorkshire, donde han comprado a los agentes una Kawasaki Ninja H2 SX para contrarrestar las infracciones moteras.
Las estadísticas de estos grupos locales de 'speedwatches' son brutales. Sin ir más lejos, en un pueblo de 5.947 habitantes, Kent, donde el límite de velocidad es de 50 km/h, pillaron a 130.000 conductores por exceso de velocidad en una semana.
Naturalmente hay una importante polarización de opiniones. Están los voluntarios que dicen a medios nacionales que "todo lo que queremos hacer es evitar que vayan rápidos por nuestras carreteras" a los que critican que "deberían utilizar sus recursos para salir de las comisarías e investigar crímenes reales".