Allá por el mes de febrero de este año me encontraba leyendo la noticia de unos compañeros Endureros que fueron “cazados” en la comunidad de Castilla-La Mancha practicando su deporte favorito, por un helicóptero de la Consejería de Agricultura y Medioambiente de dicha comunidad. ABSURDO, fue la primera palabra que se vino a mi mente. Perseguir a dos Endureros con un helicóptero y una cantidad de medios humanos y técnicos dignos de operaciones especiales del ejército es simplemente ABSURDO.
Pero no creáis que todo este obsceno empleo de medios es para evitar un delito medioambiental. Lo que en realidad hace la Junta es ir tras una posible falta administrativa leve, cuyos importes en caso de sanción, serían de entre 60 € y 600€ como máximo. Frente a los 2.500 euros que cuesta una hora de vuelo de un aparato de similares características, sin contar con el piloto, ni los demás funcionarios que forman el operativo. Pero esto, no acaba aquí.
En estos tiempos que corren, donde la Junta de comunidades de Castilla-La Mancha ha recortado los sueldos de los funcionarios, ha adoptado medidas de ahorro en los centros de trabajo que derivan en el cierre de los mismos para no generar gastos de calefacción y electricidad con el consiguiente perjuicio para los ciudadanos, después de los muchos recortes en turnos y refuerzos en distintos cuerpos de la administración regional y donde se están retrasando el pago de facturas a proveedores y acreedores, esta misma administración gasta cantidades ingentes en perseguir por faltas administrativas a las motos de campo.
Os podéis imaginar el revuelo que causó la noticia por toda la red, con las consiguientes quejas hacia la consejería de Agricultura y Medio Ambiente, aclarando posteriormente que el helicóptero no estaba allí para cazar Endureros, si no para proteger fincas particulares de la invasión de cazadores furtivos (igualmente cazando moscas a cañonazos). “Y ya que pasaban por allí”. Pero según pude leer en la página de AMW en Mayo de este año volvió a ocurrir un episodio similar intentando derribar a un motorista con los patines del helicóptero, por lo que el empleo de estos medios se repite.
Llevo más de 15 años saliendo en moto de campo, conozco el terreno por donde monto y se como estaba y como está. En ocasiones no veo ni mis propias marcas pese a circular tantos años por los mismos sitios. Como casi todos los colectivos el de los usuarios de la moto de campo esta formado por muchos tipos de personas y los que destrozan tierras recién sembradas, marcan circulan por los cauces de los ríos, espantan rebaños o simplemente no respetan a otros usuarios del campo, no son “los de las motos” en general, si no personas en concreto que en ese momento llevan una moto.
Tengan mano dura con estas personas, pero no me digan que no puedo pasar por un camino ancestral anegado de zarzas y maleza que se ha perdido por el desuso, que no circule por senderos empedrados y todo por que no tienen un ancho determinado, o por que "teóricamente" hago daño al campo. Y todo ello justificado por normativas ambiguas e injustas. Aunque por fin parece que en alguna comunidad autónoma esta comenzando a poner remedio a esta situación. Así en Cataluña con la aprobación definitiva de la famosa “Tarjeta Verde”, que facilite un adecuado control de los usuarios motorizados para la práctica del off-road en todas sus vertientes. Esta tarjeta, permitirá el uso de una serie de caminos y sendas de todo tipo, sin las restricciones de dimensiones que había hasta ahora y que deberán enlazar las diferentes áreas off-road existentes en Cataluña.
Por suerte para nosotros los motoristas, no somos los que provocamos los graves incendios ni arrasamos cantidad de hectáreas de masa forestal, no contaminamos con dioxinas ni promovemos proyectos urbanísticos, no vertemos residuos y nuestros vehículos producen mínimas emisiones. Aunque hasta ahora se nos trate como delincuentes esperemos que esta nueva iniciativa en Cataluña se exporte a otras comunidades y terminemos por erradicar el ABSURDO de nuestro territorio.
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