El timo de los retrovisores ya está en España. Si ves el espejo de tu moto girado, ten cuidado: podrían querer robártela

El timo de los retrovisores ya está en España. Si ves el espejo de tu moto girado, ten cuidado: podrían querer robártela
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Las motos son un jugoso botín para los ladrones. Ya sin tapujos, muchos las roban a plena luz del día, o incluso delante de la gente. Los hay más precavidos, y tienen ciertas tácticas para saber si el dueño de la moto está cerca, o por lo menos, lo estará cuando la vayan a robar.

¿El truco? El espejo de tu moto. Puede que no te hayas dado cuenta, o pienses que ha sido despiste, pero si no está en su posición normal y tú no lo has tocado, ándate con ojo.

¿Espejo girado? Mal síntoma

Los robos de moto son preocupantes. El último truco que utilizan los ladrones para saber si una moto está relativamente abandonada o no y robarla con facilidad consiste en doblar los espejos de una moto aparcada, cuenta El País.

De esa manera, si pasados unos días, esos espejos están doblados de la misma manera, es probable que el dueño no coja la moto más durante un tiempo. Es decir, vía libre para robar la moto y marcharse con ella más fácilmente.

Es una situación normal el dejar la moto aparcada en la calle durante unos días; se recomienda, en estos casos, visitarla de vez en cuando y fijarse en estos detalles, como el de los retrovisores. La falta de atención es una forma más de contribuir a que se lleven la moto.

Espejo 3 2024

Los datos son difusos, pero según recoge Infobae, el Ministerio del Interior asegura que en España, cada día, se roban de media unas 22 motos. Donde más, en Andalucía (con gran diferencia, además), Madrid y Comunidad Valenciana.

Las más robadas, modelos scooter como la Honda Scoopy 125, la Yamaha T-Max o la Kawasaki Z 800. La mayoría de estos grupos roba las motos y las despieza para luego exportarlas a otros países y continentes, donde se venden a demanda y gracias a lo cual pueden llegar a ganar ingentes cantidades de dinero.

La forma de robarlas es milimétrica, y rápida: pocas veces se marchan con ella puesta. Lo más habitual es cargarla en una furgoneta entre varios, o bien tirarla a un colchón para luego subirla y desaparecer en cuestión de segundos. Luego, es prácticamente imposible dar con ella a no ser que tenga un localizador.

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