XTR Pepo Don Luis, un señor alemán con mucho carácter
Pepo Rossel parece que está inspirado últimamente. Las creaciones de XTR Pepo no dejan de sorprendernos, especialmente cuando se sale de su zona de confort asociada normalmente con Ducati y se atreve con grandes clasiconas como una gran roadster alemana como es la BMW R100R de 1992 a la que han llamado Don Luis.
Inspirada en el mundo de la resistencia y empleando a su motor bóxer de dos cilindros como parte fundamental del diseño de esta nueva deportiva clásica, Don Luis no se parece en nada a lo que originalmente fue. Estilo retro y soluciones únicas se unen en el inconfundible estilo del preparador español.
Don Luis, todo un caballero
El chasis de tubo de acero original se ha modificado intensamente para dejar a la vista todas sus partes de fábrica y alguna más que se ha añadido para reforzar, como unos nuevos tirantes longitudinales y verticales para reforzar la estructura. La parte trasera recibe un subchasis totalmente artesanal que ahora monta un conjunto de asiento/colín monoplaza minúsculo que originalmente fue de una Yamaha TZ.
Para actualizar la parte dinámica y darle un toque mucho más racing la horquilla telescópica convencional deja paso a un tren delantero de Ducati Sport Classic con horquilla invertida, tijas, semimanillares Tomaelli, llanta de radios y un equipo de freno Discacciati (pinzas y discos) con bomba de freno radial de la misma marca y latiguillos de kevlar Frentubo.
Siguiendo con la mecánica, en el eje trasero se incorpora un amortiguador Öhlins que levanta el culo para mejorar las geometrías hacia un enfoque más deportivo. También se ha mejorado el tacto del embrague con material de Suzuki GSX-R 600, los soportes de las estriberas son de Derbi GPR 50 modificados con estriberas Tarrozi, al portamatrículas hecho a mano se le coloca un faro de Montesa y el caballete lateral es de Yamaha TRX. Una mezcla muy particular.
El vestido que luce esta alemana con ascendencia transalpina se compone principalmente por un un depósito de combustible modificado procedente de una Moto Guzzi que se conjunta con un semicarenado de doble óptica y un gardabarros delantero firmados por XTR Pepo. Todo pintado en una combinación de azul y blanco clásica y deportiva al mismo tiempo y salpicada de pegatinas que le dan ese aire de carreras tan especial.
En el motor los cambios no son pocos. El cárter se ha reducido a la mínima expresión y se ha elevado la posición del motor para ganar espacio libre al suelo, se ha aligerado y revisado en profundidad. Se ha trabajado en las cámaras de combustión para mejorar el flujo de gases, árbol de levas de carreras y pistones de alta compresión aligerados para darle alegría a este viejo bóxer.
Los periféricos del motor se componen de un filtro de aceite externo con radiador de aceite de Ducati Paso para asegurar la refrigeración, escape Il Trombone con línea hecha a mano por Supermario y una alimentación que se encarga a una pareja de carburadores Keihin FCR 40 con filtros DNA y puño de gas rápido Tomaselli.
Para afinar aún más el funcionamiento de este motor de cilindros opuestos se ha añadido un regulador electrónico nuevo y una electrónica Silent Hetkit capaz de modificar la inyección con 16 mapas diferentes. Todo alimentado por una pequeña batería LiPo que reduce su tamaño al mínimo y ocupa mucho menos espacio.
¿Qué opinas? No hay duda de que hay mucho trabajo detrás. A nosotros el resultado nos convence más allá de gustos.