Aunque parezca raro, si hacemos una búsqueda en la red prácticamente no aparece nada de información sobre la vida de este hombre. Bueno, lo que aparece son las referencias de los dos tomos de su autobiografía, pero poco más. Husmeando en los libros que guardo en casa encontré algunos datos más sobre su vida, que son los que voy a resumir aquí. Colin Seeley empezó como vendedor de motocicletas a los 18 años, trabajo que compaginaba con la participación en el nacional británico de Sidecar. Campeonato que ganó en dos ocasiones para acabar retirándose en 1967, momento en el que empezó a diseñar motos que resultaron vencedoras en manos de muy diversos pilotos. A lo largo de su carrera incluso llegó a colaborar con Brabhan en sus coches de Fórmula 1.
Seeley se hizo con los derechos de fabricación de la AJS 7R y la Matchless G50 en 1966, ambas motos de competición de la época y a partir de ahí empezó a desarrollar su propio chasis. Con esta combinación sus motos fueron cosechando títulos como la victoria de Dave Croxford en el campeonato británico de 1968, la victoria de John Cooper en la North West 200 de ese mismo año. En 1969 las Seeley G50 consiguieron el 3º, 4º y 5º puesto en el Senior TT de la Isla de Man y John Blanchard repitió victoria en la North West 200.
Quizá la cúspide de las victorias de las Seeley llegó en 1970, con el cuarto lugar en el Campeonato del Mundo de 500 cc alcanzado por Tommy Robb. Una posición excepcional si tenemos en cuenta que por delante solo quedaron tres pilotos oficiales, Giacomo Agostini, que ganó con MV Agusta 10 de las 11 carreras disputadas, Ginger Molloy sobre Kawasaki, y Ángelo Bergamonti sobre otra MV Agusta, que fue el único que pudo batir a Agostini en una carrera.
Con ese palmarés los encargos no dejaban de entrar en la fábrica de Seeley, que en su mejor momento solo empleaba a 67 trabajadores. Ducati pidió ayuda para el diseño del chasis de las nuevas Ducati GP bicilíndricas de 500 cc. Suzuki recurrió a los diseños de Colin Seeley para conseguir extraerle todo su potencial a la indomable Suzuki TR500 e incluso Kawasaki utilizó bastidores Seeley en sus 750 cc tricilíndricas de dos tiempos. A finales de los setenta, Seeley también colaboró con Honda, colaboración que sentó las bases de las futuras Superbikes japonesas.
Como nota curiosa Seeley también desarrolló la Honda TL 200 de Trial, una moto que actualmente es una de las piezas más buscadas en el mundillo. Y eso que en su momento se consideró un fracaso comercial.
La moto que ilustra este articulo se trata de una Triley, denominada así por montar un motor Triumph 6T en un chasis Seeley. Esta moto es propiedad de Vincent Michel, un aficionado francés que la ha restaurado y que gracias al trabajo de pintura de Aero Color Design luce así de bonita. En el apartado técnico el motor ha sido "engordado" hasta los 750 cc y se le han instalado pistones aligerados de alta compresión y bielas reforzadas. El freno delantero y la horquilla son también Seeley, mientras que la caja de seis velocidades procede de Quaife. Esta moto se diseñó para participar en carreras en cuesta y en carreras de clásicas, aunque viéndola tan limpia y perfecta casi dan ganas de guardarla para admirarla como si de un tesoro se tratase.
Las fotos que veis han sido realizadas por el propio Vincent Michely fueron publicadas inicialmente por Frank Charriaut en su blog MotArt. Trabajo clásico de primera división.
Vía | Bike Exif; MotArt Wikipedia | Temporada 1970 Mundial de 500 cc Más información sobre | Colin Seeley en Motorbike Search Engine; Aero Color Design; Algunos datos extraidos de La enciclopedia de las motocicletas, Edimat Libros