Siempre que pruebo un scooter de 125 me asalta la duda de si me meto en autopista, me jugaré el pellejo al ser rebasado hasta por el “carrito de los helados” o por el contrario, podrá defenderse dignamente.
Aunque la Suzuki Burgman 125 Executive ya me había demostrado por carretera que aunque seguramente no iban a costarme una multa ir con el acelerador enroscado al máximo, sí podría moverme más que dignamente de un lado a otro. Algo que cobra especial consideración si resides a las afueras de una ciudad grande como Madrid, Barcelona, Valencia, Zaragoza, etc.
Incluso si nos queremos aventurar a hacer un viajecito más o menos largo, este scooter nos lo permitirá tanto por capacidad de carga como por confort con el paso de los kilómetros. Ya comentábamos ayer que la ergonomía estaba muy lograda independientemente de la talla que tuvieses.
Protección aerodinámica más que suficiente y posibilidades de incorporarle algún accesorio original como en el caso de la Suzuki Burgman 125 Executive que hemos probado que cuenta con el respaldo para el pasajero.
Suzuki Burgman 125 Executive, comodidad para dos
Si hemos comprobado que la Suzuki Burgman 125 Executive es cómodo para el conductor, es igual o más cómodo para el caso del pasajero. Su único pero quizás es que no cuenta con reposapiés específicos y te obliga a llevar los pies sobre la plataforma que siempre es un poco más incómodo. Aunque por otro lado, tiene su posición completamente delimitada para evitar en la medida de lo posible que puedan resbalarte los pies.
A ambos lados cuenta con asas de generosas dimensiones y correctamente colocadas para poder agarrarse sin dificultad. El mullido del asiento es muy agradable y suficiente para que el paso de los kilómetros transcurran sin fatigarnos.
Como es una moto muy baja de asiento, esto repercute también en el del pasajero que aunque está un poco más alto, permite pasar perfectamente la pierna por encima para acomodarnos. Si llevamos el respaldo, tendremos un poco más de dificultad como suele ocurrir.
En marcha y con esos kilos extras, el comportamiento dinámico de la Suzuki Burgman 125 Executive sigue siendo correcto. La distancia al suelo se ve reducida y quizás sea un poco más fácil pegar con el caballete, sobre todo en alguna rotonda o circulando por carretera.
De igual forma y si vamos a circular así asiduamente, tendremos que endurecer un poco la precarga atrás para evitar ligeros movimientos del tren trasero que en algunos momentos nos pueden incomodar. Ese extra de peso atrás nos permite por otro lado tirar con más decisión del freno posterior, siendo ya mucho más difícil bloquearlo pero manteniendo un buen nivel de frenada.
Para el viernes, hablaremos del espacio de carga en detalle así como de los consumos y todas aquellos detalles que os puedan interesar. Además de hacer nuestra valoración final.
Parte anterior | Suzuki Burgman 125 Executive, prueba (conducción en ciudad y carretera) Siguiente parte | Suzuki Burgman 125 Executive, prueba (conclusiones y galería de fotos)