Los que le echaron un ojo a la prueba de la Kymco K-XCT de la semana pasada, habrían observado que en la última foto no llevaba el casco que uso normalmente para conducir sino otro completamente negro, pero Schuberth también.
DynamicLine nos cedia un Schuberth C3 Pro, la última de sus novedades que vio la luz durante el pasado Salón de Colonia, que fue cuando tuvimos la oportunidad de hablar sobre el por primera vez.
Ahora, ya en nuestras manos, lo hemos sometido a una prueba a fondo en condiciones reales pudiendo compararlo con otros modelos de similares características.
El uso del Schuberth C3 Pro está extendido entre el cuerpo como la Guardia Civil y muchos de la Policía Local. He tenido ocasión de hablar con alguno de ellos y todos lo han situado como uno de los mejores cascos modulares. ¿Será tan bueno como dicen? Vamos a comprobarlo.
Schuberth C3 Pro, datos técnicos
El Schuberth C3 Pro ha llegado al mercado para convertirse en la referencia del segmento modular. Y atractivos no le faltan según podemos dadas sus características técnicas.
Dispone de dos calotas diferentes en función de la talla del casco. Está fabricada en su ya conocida fibra S.T.R.O.N.G, de fibra de vídrio a la que se le añade una resina especial para posteriormente comprimirla en condiciones de vacío a alta presión y así conseguir una gran resistencia.
El material de la calota interior por su parte es de espuma EPS de múltiples densidades y diseño modular para poder absorber cualquier tipo de impacto.
Algo también muy importante como es el forro interior. Materiales COOLMAX, Thermocool y un revestimiento adicional Interpower consiguen refrigerar y evacuar la humedad, además de ofrecer un buen confort.
Lógicamente el interior es completamente desmontable y lavable, antialérgico, antibacteriano y dispone de almohadillas extraíbles para mejillas y frente y así mejorar el confort, así como un deflector en la parte inferior desmontable si queremos.
El sistema de cierre en este caso es de tipo trinquete Micro-lock, con ajuste a ambos lados para que evitar que quede descentrado. Además, las almohadillas situadas entre la correa y nuestra barbilla llevan un enganche de velcro para que no se mueva con el uso.
El peso del Schuberth C3 Pro es relativamente bajo para ser un casco modular y así, en la talla M arroja un peso en báscula de 1.570 gr. Aunque ya hablaremos de ello, la sensación es una vez puesto de que no pesa tanto como parece en las cifras y eso es de agradecer para evitar el cansancio en el cuello.
El visor tiene una forma muy particular y está, como no podía ser de otra forma, tratada en el exterior para evitar arañazos y en el interior con tratamiento anti-vaho aunque junto con el casco también se entrega un pin-lock para que no tengamos absolutamente ningún problema de visión.
Su desmontaje es muy sencillo, sin herramientas. Solamente hay que llevarlo hasta la parte superior y liberarla mediante una pequeña palanca. La colocación es igual de sencilla pero haciendo los pasos inversos.
Dispone de dos tiradores, uno a cada lado para abrirla y cerrarla, donde nos encontramos con dos posiciones: una para ciudad en la que la pantalla queda ligeramente elevada gracias a una pestaña en el centro que hace de tope contra la parte delantera de la naricera. Una vez en carretera y empujando un poco más hacia abajo la visera, queda enganchada para un óptimo cierre.
Si os fijáis en las fotos, en la parte superior tiene como una especie de picos. Son los denominados turbularores, que optimizan la aeroacústica con el visor levantado y evita los molestos pitidos que se producen cuando el aire incide sobre superficies planas.
Interiormente el Schuberth C3 Pro cuenta con otra visera, de tipo parasol y que permite circular más cómodamente en fuertes condiciones de luz. Se maneja desde el lateral inferior izquierdo con un pasador. Si lo llevamos hacia atrás, el pasador desciende de su ubicación.
Lógicamente, siendo un casco modular, la carrillera o frontal es practicable. Se desbloquea con un pulsador situado en el centro que actua sobre los dos cierres de los extremos. Es una de las novedades respecto al modelo anterior y se aprecia sendos pivotes metálicos, con un sistema de anclaje proveniente de la industria del automóvil.
El pulsador actua sobre un lateral y el otro se desbloquea mediante un cable Bowden, por lo que con solo aplicar una fuerza de aproximadamente 16N (muy poco), ya podemos subirla hasta quedar bloqueada de forma automática en la parte superior.
Schuberth C3 Pro, tecnología
El túnel de viento vuelve a cobrar especial importancia en el diseño exterior del Schuberth C3 Pro. Probado a velocidades superiores a los 160 km/h se ha buscado que el casco no tienda a tirar de la cabeza hacia arriba. Es la denominada tendencia ascensional y en este caso es cero.
Para ello se ayuda de diversas partes integrada como un deflector integrado en la parte superior y otros dos en la parte baja frontal para hacer un borde inferior recto. Con todo ello aumenta la estabilidad direccional, disminuye la tendencia a oscilar y el efecto "buffering" también es menor. El diseño se ha optimizado tanto en conducción normal como deportiva.
Muy importante el tema del aislamiento acústico, sobre todo en modelos de casco modulares. Las cifras que consigue el Schuberth C3 Pro son muy buenas, de sólamente 82 dBA a 100 km/h y era algo que tenía ganas de comprobar y compararlo con el Schuberth SR1, sin duda el casco más silencioso del mercado.
Si hablamos de la ventilación, el Schuberth C3 Pro destaca por un diseño exterior relativamente limpio. Nada de cientos de tomas repartidas por el caso. Únicamente dispone de dos tomas, la superior es regulable, es decir que dependiendo de cuánto desplacemos la pestalla hacia atrás, mayor flujo de aire penetrará en el casco.
Este aire se distribuye por el interior gracias a los canales realizados en la espuma EPS para posteriormente salir por la parte de detrás, tanto por las salidas de aire específicas creadas para tal fin como por el tejido de malla de la nuca, que además es reflectante para mayor seguridad.
La otra toma de aire está situada sobre la barbilla y dirige el aire directamente hacia la pantalla y hacia la parte superior de la cabeza. Aun con todas las tomas cerradas se garantiza una renovación constante de aire para evitar la saturación de CO2 en el interior. Con las tomas abiertas y a 100 km/h se llegan a intercambiar hasta 9 litros de aire fresco.
Schuberth C3 Pro, seguridad
En cuanto a la seguridad, el Schuberth C3 Pro dispone de un dispositivo de seguridad que evita que en caso de caída la carrillera pueda abrirse de forma accidental.
Además, también cuenta con el sistema que ya vimos en el Schuberth SR1 denominado Anti-Roll-Off System (A.R.O.S.). Dos tiras unen la carrillera con la parte posterior del casco de forma que el casco no nos saldrá de la cabeza aunque se tire de él desde la parte posterior. Así mismo también minimiza las posibilidades de que la barbilla golpee la mentonera del casco, algo muy común en los golpes frontales. Por último, el Sistema Anti-Roll-Off reduce las secuelas de los accidentes que se produzcan como resultado del contacto del casco con el pecho.
Para acabar, comentar que el Schuberth C3 Pro está disponible en medidas desde la 50/51 (XXS) a la 64/65 (XXXL) y en seis colores: Glossy Silver, Glossy White, Glossy Black, Matt Black (el modelo probado), Fluo Yellow y Fluo Orange.
Mañana nos enfundaremos el casco y veremos qué tal se comporta en carretera y si podemos apreciar todo lo que os hemos ido contando. Pero hasta entonces, os dejo con un vídeo de todo lo que os hemos ido desgranando:
Continuará…
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