Ayer os dejamos con el gusanillo de conocer más de las RAV MiniGP, sobre todo si vais camino de peinar canas y el correr la Copa de España RAV MiniGP ya os queda lejos por edad y flexibilidad. Y es que RAV Riders pone a nuestra disposición un kit de conversión para que podamos pasar la RAV MiniGP 160 a naked.
Así y de un plumazo, tendremos una moto más parecida a una minimotard aunque enfocada cien por cien a un uso en asfalto. Como uno no lleva bien lo de ser contorsionista, decidimos dejar a un lado la versión R y probar el modelo naked. ¿Es divertida? ¿Cómo se comporta? Las respuestas, a continuación.
RAV MiniGP 160 versión naked
El precio de la conversión es muy económico, 150 euros. Con ello tendremos todas las piezas necesarias para pasar la moto de, como decíamos ayer, mini Ducati 1198 a mini Ducati Monster. Fuera carenados, fuera semimanillares y hola manillar más ancho.
Con ello obtendremos una posición de conducción más cómoda y agradable aunque, al contrario de lo que ocurre normalmente con las motos de carretera, no más sencilla de conducir. Esto es porque la combinación de llanta 12 y una palanca tan grande hace que la moto sea muy sensible a los esfuerzos que hagamos sobre el manillar.
Tras ponernos a los mandos y un par de patadas, el motor cobra vida. Si ayer echasteis un vistazo a las características técnicas de las motos, veríais que anotábamos que el cambio es de cuatro velocidades N-1-2-3-4 en vez de lo normal que sería 1-N-2-3-4
Este es el cambio más grande respecto a una moto convencional y quiere decir que todas las marchas van hacia arriba para cambiar a una superior y hacia abajo para reducir hasta llegar al punto muerto, del cual no hay señalización por lo que hay que hacerlo “a ojo”. Al final y en la práctica solo debemos tenerlo en cuenta para arrancar y detenernos.
Soltamos embrague y salimos dando gas y empalmando marchas. Con 85 kilos de moto y unas ruedas tan pequeñas, la agilidad es inmediata y cuando insinuamos la entrada de la curva ya la habremos trazado, incluso antes de tiempo.
A los pocos metros notamos que la anchura del manillar quizás sea desproporcionada respecto a lo que podríamos esperar. Para mi gusto y acostumbrado a llevar supermotards, que mira que el manillar es de los más anchos que hay, era incluso mayor. Y como decíamos, en cuanto tiremos un poco de las punteras del manillar ya tendremos la moto inclinando.
Seguro que en las primeras curvas nos encontraremos perdidos y con verdaderos problemas para mantener la trazada y no serpentear descontroladamente. Pero con el paso de los minutos desaparece y poco a poco ya vamos encontrando nuestra postura a los mandos.
Aumentamos ritmo cada poco notando que la RAV MiniGP 160 (o debería decir RAV Naked 160) aguanta perfectamente tanto en chasis como en parte de ciclo. Únicamente endureciendo un poco el amortiguador trasero a tenor e nuestro peso y ya la tendremos lista para divertirnos como enanos.
Con 14 cv, el motor no tiene patada en el rango de revoluciones. Es una moto divertida de conducir aprovechando el paso por curva y frenando lo mínimo, de forma similar a la Copa Honda CBR250R. La prueba la realizamos en el karting madrileño de Los Santos, en la localidad de Los Santos de la Humosa y con la relación de transmisión de serie, cortábamos en dos puntos del trazado. Al igual que en las minimotard, es imprescindible jugar con el piñón y la corona para sacar lo máximo, dependiendo del circuito en el que corramos.
Por último, seguro que os asalta una duda que nos querréis preguntar: ¿qué me compro, una minimotard o una RAV MiniGP/Naked? Pues depende de si solamente quieres divertirte un rato o bien buscas rodar o competir de forma amateur.
La orientación de las RAV MiniGP es de contar con una moto eficaz sin ningún tipo de preparación y con igualdad mecánica para todos. Claro que se puede potenciar y trastear en su motor, pero no es tampoco lo que se busca.
Su orientación es sobre todo para niños ya que dispondrán de una moto con sensaciones, postura y comportamiento más cercano a las motos de competición. Si por el contrario ya somos adultos y pensamos en una alternativa económica, quizás las minimotard estén un paso por delante. Su precio es similar aunque sus prestaciones son superiores (más potencia, unos 17 cv de serie para una 160 como la que probó para nosotros Alberticu (parte uno y parte dos) y un peso inferior).
Aun así, las RAV MiniGP seguro que se convierten en un éxito de participación para los jóvenes aprendices de piloto. Copas de promoción de este tipo, económicas e igualadas son lo que hace falta para que todo el mundo pueda participar.
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