No entiendo bien si es que en Rusia utilizan mucho más las cámaras, si van tajados a todas horas o tienen más conflictos de la cuenta entre vecinos, pero una vez más nos volvemos a quedar con la boca abierta. Un grupo de tres motoristas van tranquilamente por un camino de tierra y al llegar a una intersección se encuentran con un coche.
El que va primero, que lleva la cámara, no cede el paso, pero tampoco interfiere demasiado al conductor del Lexus que venía por la derecha. Al escuchar la sonora pitada el motorista se hace a un lado y se detiene, y el tipo del Lexus, como poseído por los espíritus del vodka, se baja del coche sin echar el freno de mano ni nada y se abalanza sobre el motorista.
La reacción del tipo de la moto no es la más cordial posible, pero el otro tampoco es que haya dado muchas más opciones. Como no entiendo el ruso no sé lo que dicen, pero lo mismo hay una disputa intelectual sobre metafísica detrás y estamos hablando más de la cuenta.
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