Esto es el sueño de la moto anfibia hecho realidad, pero sin inventos raros. Tu moto, tal y como la tienes aparcadita en tu garaje, podrá lanzarse a surcar el Mediterráneo con este invento que ha patentado José Antonio Aguilera, un joven malagueño que a raíz de una experiencia propia se le encendió la bombilla y se lanzó a desarrollar esta idea.
El artilugio consiste en una válvula de tres vías colocada a la salida del tubo de escape. La válvula, con una entrada y dos salidas, introduce el humo por un tubo metálico flexible hasta un dispositivo que lo enfría. Ese aire será el encargado de inflar los dos flotadores de neopreno que irán ubicados a ambos lados de la moto, que se sumerge hasta quedar bajo el agua un tercio de la altura de sus ruedas. De este modo, la rueda trasera ejerce de motor, y la delantera de timón. La verdad es que habrá que verlo funcionar, pero que el invento haya sido premiado por el Club de Inventores Españoles a la mejor idea sobre vehículos anfibios de dos ruedas, supongo que es una garantía. De momento, y a la espera de alguien que ponga el dinero para empezar a desarrollar el prototipo, nos tendremos que conformar con las explicaciones técnicas. Y todo esto por quedarse atrapado en un arroyo con su moto de enduro...
Vía | La Vanguardia