Parece que Movistar no se va a quedar únicamente en el tema de los derechos de retransmisión del Campeonato del Mundo de MotoGP sino que en el ámbito del MWC2014 (Mobile World Congress 2014) que se celebró en Barcelona, presentaron lo que han denominado Smart Helmet, o lo que es lo mismo, un casco inteligente que tiene la particularidad de interactuar con nuestro smartphone usando como dispositivo de control uno de los guantes.
En funcionamiento es relativamente sencillo: nuestro teléfono es capaz de conectarse vía Bluetooth con el casco, donde está instalado unos altavoces con sistema 3D y un micrófono. Al mismo tiempo, nuestro guante cuenta con sensores en los dedos pulgar e índice que permiten detectar los movimientos que hacemos y con ello navegar a través del menú del teléfono sin necesidad de tocarlo.
Pero esto es como quien dice la primera fase para llegar a un casco hiperdesarrollado por lo que hemos visto en una de las infografías. Este casco estilo Robocop lleva cámara frontal y trasera, células fotoeléctricas para la batería, luz de emergencia, altavoces, micrófono, sistema de vibración, luz de emergencia en caso de accidente...
¿Qué es capaz de hacer el Smart Helmet? Pues desde comunicarnos con el resto de motoristas con los que vamos en grupo, utilizar el GPS, manos libres para las llamadas, tomar fotografías o vídeos y compartirlos en las redes sociales o por ejemplo, detectar que hemos sufrido un accidente y avisar a los servicios de emergencia.
Realmente esta última parte es la que de verdad nos parece la más interesante porque si vamos intentando tomar una fotografía con dos dedos de la mano derecha mientras circulamos sobre la moto, hay bastantes posibilidades de que tarde o temprano necesitemos una ambulancia.
Siempre he defendido la investigación en todos los ámbitos, hasta en lo más absurdo. Algo así como la teoría del espejo israelí que aparece llamada en el libro Guerra Mundial Z como Informe Warmbrunn-Knight. En pocas palabras, si en un consejo de diez asesores nueve están de acuerdo en algo, el décimo debe remover Roma con Santiago para demostrar que lo que va a ocurrir es lo contrario mediante teorías aunque sean absurdas. De esta forma uno puede ponerse en el peor de los casos y encontrar otra verdad. En tecnología, hay algo parecido. Investigar, investigar, investigar... aunque el resultado sea absurdo porque puede que de ello surja otra idea que sea la buena.
En el caso del Smart Helmet, la idea no es mala pero quizás, falta alguien implicado en el proyecto que haya montado en moto...
Vía | El Comercio Vídeo | Foro Wingers Más información | Telefónica.com