El Ten Kate Racing se declaró en bancarrota hace unos meses después de estar presente desde hace 18 años en el Campeonato del Mundo de Superbike. El motivo: HRC anunció en el pasado EICMA su mayor implicación en Superbike con Moriwaki en la parte técnica y el Althea Racing en la parte logística, lo que dejó fuera al equipo holandés.
Por tal razón, el equipo puso a la venta varias de sus motos, incluida alguna superbike. Una de ellas, quizás la más importante por su historia, ya ha sido vendida: la Honda CBR1000RR SP2 de Nicky Hayden con la que corrió su último Mundial en 2017 antes de su fallecimiento.
Una moto con las especificaciones de Hayden
Después de aproximadamente un mes en el que el Ten Kate Racing ha hablado con varios compradores finalmente por fin han cerrado la venta. Tal como nos confirma el equipo, la moto está embarcando hacia su próximo destino.
Aunque hemos intentado indagar dónde va la moto, no nos han podido decir quién ha sido el comprador ni tampoco hacia dónde va a viajar esta superbike. El nuevo propietario no ha querido darse a conocer.
La moto se puso a la venta en el momento en el que Honda rompió su contrato con el equipo. Antes no podían vender con ella ya que en su acuerdo estaba especificado que no se podía comerciar con las antiguas motos de competición, solo con réplicas. Sin embargo, tras el inesperado final con la marca japonesa, Gerrit Ten Kate, propietario del grupo Ten Kate, se vio obligado a poner a la venta la moto, que pertenecía a su colección privada, con vistas a conseguir dinero para el año 2019.
La moto se ha vendido con la configuración y los requisitos de Nicky Hayden durante las carreras: tiene un chasis específicamente creado a partir de los gustos del piloto, unos reposapiés especiales, el asiento está específicamente diseñado para el piloto de Kentucky, igual que la pantalla y la posición del manillar. Todos estos elementos tienen un certificado de autenticidad firmado por el propio Gerrit Ten Kate.
Esta Honda CBR1000RR de competición tiene un motor TKR con kit Cosworth. Para la electrónica optaron por un paquete Cosworth con acelerador electrónico TKR. Su horquilla delantera está a cargo de la marca Öhlins. Las pinzas radiales Nissin y los discos Yutaka son los responables de frenar a esta superdeportiva con un chasis de aluminio reforzado. Su basculante es un TKR/GPMS con las especificaciones de Hayden. Las llantas son Marchesini y el escape lo firma Akrapovic. Tanto la horquilla, como los frenos y el escape tienen especificaciones de WSBK.
El precio final de la transacción ha sido finalmente de 95.000 euros más el coste del transporte hasta su lugar de destino. Es interesante apuntar que son 10.000 euros más que la Honda CBR1000RR SP2 con la que corrió Jake Gagne en 2018 y que también la pusieron a la venta hace unos meses por un precio de 85.000 euros (vídeos y fotos de la moto de Gagne).
De momento no se conoce el futuro del Ten Kate Racing, solo que podría ir ligado con Suzuki. El equipo japonés estuvo a punto de entrar en el campeonato en 2018 de la mano del Gillini Racing, pero no pudo ser porque detuvieron al propietario del equipo días antes de comenzar la temporada.
En 2019 aún no hay nada oficial con respecto a esta unión. Suzuki se podría convertir en la sexta marca en formar parte del Campeonato del Mundo de Superbike en 2019 junto con Kawasaki, Ducati, BMW, Yamaha y Honda, pero habrá que esperar a la tercera ronda que se correrá en el circuito de Motorland Aragón del 5 al 7 de abril para confirmar que vuelven a la competición.
Lo que está claro es que el Ten Kate Racing necesita liquidez y la gestión mercantil de esta moto era muy importante para ellos. En las conversaciones que hemos tenido con Kervin Bos, el team manager, nos aseguró que era vital para ellos poder vender la superbike de Nicky Hayden para el presupuesto que tenían en previsión para este año.