Así deben viajar los niños en moto: desde 7 años, con casco y otras recomendaciones útiles
Cuántas veces hemos visto cómo los niños viajan de cualquier forma en las motocicletas y todas incorrectas, sin ir bien sentados o incluso de pie en la parte delantera con el consecuente peligro.
En España existe una normativa que regula e indica cómo deben ir los niños sentados adecuadamente en los vehículos con motor de dos ruedas. Te explicamos cuáles son estas reglas para que los más pequeños de la familia vayan de la forma más segura posible y disfruten de la afición por las motos.
Niños mayores de 7 años, solo con sus padres o tutores
Nos tenemos que ir al Reglamento General de Circulación que se puede consultar en la propia web de la Dirección General de Tráfico para conocer lo que dice en concreto la normativa sobre las motos y cómo deben ir sentados los niños.
En la página 16 del documento enlazado, en concreto en el artículo 12 sobre las normas relativas a ciclos, ciclomotores y motocicletas, especifica que puede viajar un pasajero que sea mayor de 12 años, siempre que utilice un casco de protección (mejor uno integral) y que cumpla dos condiciones: que vaya a horcajadas, con los pies apoyados en los reposapiés laterales, y que utilice el asiento correspondiente detrás del conductor.
Por tanto, no es correcto llevar a un niño al que le cuelguen los pies porque no llegue a los estribos o si la moto carece de estriberas. Por supuesto que es incorrecto que el menor se sitúe en un puesto intermedio entre el conductor y el manillar de la moto.
No obstante, hay una excepción a la edad: "los mayores de 7 años podrán circular en motocicletas o ciclomotores conducidos por su padre, madre o tutor o por personas mayores de edad por ellos autorizadas, siempre que utilicen el casco homologado", según indica el Reglamento.
En la normativa vigente solo es obligatorio que aquellos que vayan en moto utilicen el casco, pero es recomendable que el niño lleve también guantes, chaqueta, pantalones y botas especiales para la moto que le protejan en caso de caída y estén debidamente homologados.
Cuando llevemos a un niño en nuestro vehículo de dos ruedas debemos conducir muy tranquilos y pausados, sin acelerones ni frenadas bruscas. Los niños tienen menos opciones para agarrarse con fuerza que un adulto ni tampoco saben prever el comportamiento del conductor. Podemos ayudar a que tengan más estabilidad en la moto utilizando baúles con respaldo para que tengan otro punto más de apoyo, además de los pies en las estriberas y la sujección de sus manos sobre las asas si es que las equipa la moto.
En la conducción en moto con un pasajero, más aún si es un niño, hay que utilizar el freno trasero antes de accionar el delantero para equilibrar la moto y que no se venza con hacia delante.
Antes de subir a la moto, sobre todo en las primeras ocasiones, es más que recomendable aportar una serie de pautas para advertir al pequeño pasajero de cómo debe viajar, sin moverse excesivamente en la parte trasera para no desestabilizar el vehículo, y estableciendo unas indicaciones de comunicación en caso de que nos quiera decir algo.
Y recuerda: lo importante es disfrutar de las motos, si es en familia mejor, pero siempre desde la seguridad y la responsabilidad de cuidar de quien nos está acompañando.