El desierto engancha desde la primera vez que se visita. Es un tópico, pero cierto. Además, si el viaje es en moto, el tema no tiene remedio: siempre se vuelve. Hace años que sigo la Panáfrica, que es una prueba original con un planteamiento interesante y asequible. Permite disfrutar sensaciones como las de un Raid africano, pero sin la necesidad de ir a ritmo de carreras. Bueno, a ese ritmo también puede correrse, pero la categoría más asequible es la de navegación.
En esta categoría puedes disfrutar de los paisajes al tiempo que compites. ¿Cómo es posible? La razón es que no se clasifica en función del tiempo realizado, sino que se hace en función de la distancia recorrida (gps manda) buscando unos puntos concretos. Gana el que haga el recorrido más corto (sin excederse de un tiempo máximo, claro). Parece trivial, pero una vez participe en algo parecido entre amigos y no lo es: la línea recta se cotiza muy cara, incluso en el desierto. Por ejemplo, una duna se puede rodear o cruzar directamente, y eso son metros recorridos. Y el afán de intentar ir en línea recta te hace meterte en muchos líos.
La Panáfrica se lleva celebrando desde 1995, con lo que ya es una prueba consolidada. Será del 5 al 12 de septiembre de 2010, y el recorrido empieza en Almería (ferry), baja hasta llegar al Erg Chebbi, cruza el Atlas y finaliza en Fez. No me diréis que no es una opción tentadora. Ahí ando dándole vueltas a la posibilidad de hacer una escapada "panafricana" este septiembre...
Vía | Panáfrica