Dakar 2018: Estos son los 19 nombres propios que buscarán la épica del 40º aniversario
Nos queda poco más de una semana para que el Rally Dakar 2018 inicie en Lima (Perú) su 40ª edición. Un año en el que Marc Coma nos ha prometido que será histórica en cuanto a espectacularidad del trazado y vuelta a los orígenes con hasta siete etapas con dunas donde los pilotos se tendrán que enfrentar a los mayores retos quizá desde que el Dakar se celebra en Sudamérica.
Allí hasta 142 pilotos se van a ver las caras por imponerse en la que sin duda es la carrera más dura del mundo. Una prueba de resistencia física, mecánica y sobre todo mental en la que Sam Sunderland ostenta el título de campeón aunque la competencia será feroz.
Sam Sunderland
El británico afincado en Catar es un especialista absoluto en rallies de tierra. Su único propósito era ganar el Dakar y lo consiguió en la pasada edición siendo la primera vez que lograba acabar la carrera.
El propio Sam Sunderland confesaba recientemente que "puede haber hasta 10 pilotos que puedan optar a la victoria", y no le falta razón. Con equipos cada vez más potentes y pilotos más motivados y mejor preparados le va a ser complicado revalidar la corona.
Toby Price
Si bien Sunderland es el rival a batir por su condición de ganador en 2017, Toby Price hace lo propio como ganador en 2016. Hace dos ediciones Price se llevó el triunfo en su segunda participación en el Dakar y lo hizo por todo lo alto, después de haber cerrado la primera de 2015 con un tercer puesto.
Todas las miradas estaban puestas en él en 2017 pero una súbita fractura de fémur le obligó a retirarse de la competición. Un año después está completamente recuperado y optará a todo sobre su KTM 450 Rally oficial de la marca austriaca.
Matthias Walkner
Siguiendo con KTM, no hay duda de que la firma naranja tiene el equipo más completo y potente de cuantos compiten en el Dakar. Otro de los integrantes del Red Bull KTM Factory Team es Matthias Walkner, también candidato a llevarse el triunfo.
Segundo clasificado en el Dakar 2017, el excampeón mundial de MX3 en 2012 se pasó a los raid, ganó en Grecia en 2014 y en 2015 corrió por primera vez el Dakar. Después de dos ediciones sin llegar a la meta la pasada temporada le recompensó una dura recuperación con un podio de sabor inigualable a satisfacción.
Joan Barreda
La gran baza del motociclismo español y del equipo Monster Energy Honda Team para el Dakar 2018 vuelve a ser Joan Barreda. El piloto oficial de HRC tratará de doblegar a la horda de KTM que llevan 16 años copando el triunfo del Dakar.
El año pasado acabó quinto en la clasificación general a más de 40 minutos de Sunderland, pero debemos tener en cuenta que se adjudicó la victoria en cuatro etapas y sufrió una sanción de una hora por culpa de un repostaje no autorizado. Sin esta severa sanción se habría llevado de calle el Dakar.
Antoine Meo
Piloto de Motocross, Supercross y, posteriormente, Campeón del Mundo de Enduro. Antoine Meo complementa el Red Bull KTM Factory Racing Team con una dilatada experiencia en todas las discipinas que le sirvió para conseguir dos victorias en su primer Dakar en 2016.
Por desgracias se tuvo que conformar con la séptima posición debido a una dura caída en la 12ª etapa que además le obligó a estar lejos de las carreras durante un año y medio. El francés vuelve y está preparado para ganar. "No deberemos cometer errores, la primera semana va a ser selectiva y muy exigente".
Gerard Farrés
En Dakar 2017 tuvo un podio con presencia española gracias a la consistencia demostrada por el incombustible Gerard Farrés. El piloto del equipo Himoinsa Racing Team lleva 11 ediciones corriendo el Dakar y el año pasado logró su mejor participación.
A bordo de otra KTM, Farrés tratará de sobreponerse a una lesión de rodilla de la que no está recuperado al 100% desde la caída que sufrió en el rally de Hellas griego. "Desde 2001 tenía mal la rodilla, pero con la caída ha empeorado. Hay un dolor que no se va. Sin embargo pienso en positivo. Iré a luchar al máximo".
Ricky Brabec
Joven, californiano y con un pasado atípico. Ricky Brabec no viene de las motos, sino que su palmarés pasa por el BMX antes de pasarse a las motos hasta que en 2016 aterrizó en el primer Dakar con una novena posición.
Para desquitarse del abandono de 2017, Brabec buscará en su Honda del equipo Monster Energy Honda Team su mejor aliada. "Me siento bien, fuerte y rápido. La moto también es fantástica y creo estar en posición para pelear por una victoria cuando llegue el momento de la largada el 6 de enero".
Adrien Van Beveren
Adrien Van Beveren es otra de las grandes promesas del Dakar. Tiene sólo 26 años y lleva únicamente dos temporadas en el Dakar, pero ha concluido las dos con unos magníficos sexto y cuarto puestos.
Enclavado dentro del equipo Yamalube Yamaha Official Rally Team, Van Beveren demostrará de nuevo el por qué de su apodo "el Principito de la arena" y por qué se quedó a sólo 48 segundos del podio en 2017, pero reconoce que "he progresado mucho en la disciplina pero tengo mucho que aprender".
Franco Caimi
El compañero de equipo de Van Beveren, Franco Caimi, se subirá este año a la Yamaha oficial para consolidarse como otra de las alternativas. Sólo ha corrido una vez en el Dakar, lo hizo en 2017 y acabó con una sobresaliente octava posición, luchando de manera regular por meterse entre los mejores del mundo.
El argentino fue una de las grandes revelaciones de 2017 y buscará postularse como una gran apuesta de futuro ahora con una moto oficial. "El octavo puesto de 2017 fue un premio, pero podría haber llegado más arriba".
Stefan Svitko
Casi desconocido para muchos, prometedor para otros. Así es Stefan Svitko, un piloto esloveno que en 2016 se metió en el segundo escalón del podio contra todo pronóstico y sin el apoyo de ninguna marca de manera oficial.
En 2018 correrá para los colores del Slovnaft Rally Team sobre una KTM 450 Rally Replica exoficial y el piloto de Zaskov es absolutamente precavido reconociendo que "aunque a menudo se dice que los diez mejores pilotos pretenden a victoria no quiere decir que deba ganar".
Pablo Quintanilla
El chileno Pablo Quintanilla es otro de los grandes aspirantes a todo en el Dakar. Enrolado en las filas oficiales del Husqvarna Factory Racing está llamado a conseguir grandes logros con el título de Campeón del Mundo de Cross Country de 2016 en el bolsillo.
Ya sabe lo que es conseguir grandes logros en el Dakar, acabando en el tercer escalón del podio en 2016.
Laia Sanz
A por todas. A Laia Sanz no le vale con se la mejor piloto femenina que nunca haya participado en el Dakar ni uno de los deportistas del motor con más títulos mundiales; ella quiere disputar el Dakar como lo que es, uno de los mejores pilotos absolutos de rally.
Siete ediciones lleva participando en el Dakar y ha concluido todas ellas, afianzándose como una referencia dispuesta a meterse una y otra vez en los puestos de cabeza. Hasta ahora su mejor resultado ha sido el noveno puesto de 2015 pero ahora está más preparada que nunca.
Michael Metge
Otro de los integrantes del equipo Monster Energy Honda Team es Michael Metge, un francés de aspecto serio que puede considerarse uno de los veteranos de la disciplina después de llevar un total de cinco ediciones del Dakar a sus espaldas.
De momento ha acabado sólo en tres ocasiones pero siempre luchando por meterse entre los 10 primeros y con un mejor resultado de 13º en la edición de 2013.
Kevin Benavides
Habiendo cerrado su primera participación en 2016 con un fantástico cuarto puesto, Kevin Benavides era una de las mayores promesas del Dakar 2017. Por desgracia una inoportuna lesión en su mano derecha 15 días antes de la carrera le privó de correr la edición anterior y se quedó con las ganas de pilotar en casa.
"No correr el Dakar 2017 fue un momento muy amargo, pero que me ayudó a crecer, a madurar como piloto y como persona, encarando la temporada de la mejor manera. Ahora estoy muy bien preparado física y mentalmente, y además estoy muy motivado".
Iván Cervantes
Con cuatro títulos de Campeón del Mundo de Enduro bajo el brazo, Iván Cervantes se enfrentará por tercera vez al Dakar. Dentro del Himoinsa Racing Team, Cervantes buscará una gloria que de momento le ha sido esquiva sobre una KTM 450 Rally.
Joan Pedrero
El mejor representante para la marca Sherco será un año más Joan Pedrero. El piloto de Canet de Mar heredó la victoria en la primera etapa del Dakar 2017 tras la sanción a de Soultrait, y su consistencia son siempre un valor a tener en cuenta.
Por desgracia el año pasado una avería en su moto fulminó sus posibilidades acabando en 13ª posición. "Esta temporada he preparado el Dakar haciendo mucha arena en las dunas de Marruecos de cara a las primeras etapas, que son muy peligrosas y se puede perder tiempo. Los primeros días de Perú serán muy locos".
Jonathan Barragán
Sin experiencia en el Dakar, Jonathan Barragán se enfrenta a una gesta heroica después de haber abandonado el Motocross. El madrileño correrá para la firma española GasGas junto a Jonny Aubert y Cristian España.
Con una moto impulsada con motor KTM, Barragán tendrá que compensar la falta de experiencia en la disciplina con un físico y un ritmo demoledor para intentar buscar la meta. Un logro que si consigue dedicará a su hermano y también piloto Jesús Barragán, tristemente fallecido hace unos meses mientras entrenaba.
Xavier de Soultrait
Imponiéndose a todos los favoritos, un sorprendente Xavier de Soultrait se adjudicó la primera victoria del Dakar 2017. El galo lleva cuatro años disputando la carrera y recalando en las filas del equipo Yamalube Yamaha Official Rally Team se ha postulado como otro top.
En 2017 se ha llevado la victoria en el Rally de Merzouga y tratará de desquitarse del mal sabor de boca con el que terminó en el anterior Dakar, al finalizar en 87ª posición.
Paulo Gonçalves
Hasta hace sólo unos días teníamos al simpático Paulo Gonçalves como otro de los favoritos de cara a la victoria, pero el veterano piloto de Honda por desgracia es duda para tomar la salida en la edición 2018 del Dakar.
El de Esposende que acumula dos victorias de etapa y la segunda posición en la general de 2015 si puede correr lo hará con unas capacidades físicas bastante mermadas, lo que limita también las opciones del equipo japonés.