Al conocerse la noticia de que Jorge Lorenzo no podría correr en el GP de Australia como consecuencia de la lesión en el radio que le ha hecho ser baja en las dos últimas carreras, se hizo público que Álvaro Bautista sería su sustituto de cara a la antepenúltima prueba de la temporada.
Pero, ¿quién iba a sustituir entonces al español en el Ángel Nieto Team? Pues bien, ya hay respuesta. Karel Abraham va a subirse a la Desmosedici GP17 de Bautista, por lo que quedaría libre la GP16 del piloto checo. El equipo español ha tomado la decisión de que sea un piloto australiano, Mike Jones, campeón del Australian Superbike en 2015, quien ocupe su plaza.
Mike Jones: "Tengo ganas de aprender este fin de semana"
Jones se ha mostrado agradecido por la experiencia mundialista y lo ha transmitido así: “Estoy muy emocionado y agradecido de poder competir con el Ángel Nieto Team en MotoGP en mi gran premio de casa. Conozco bien el circuito de Phillip Island y tengo ganas de aprender paso a paso durante el fin de semana y de poder dar el máximo con la Ducati”.
Es la segunda vez que el australiano va a competir al más alto nivel, ya lo hizo en 2016 en los Grandes Premios de Japón y Australia como sustituto de Héctor Barberá que a su vez estaba sustituyendo al lesionado Andrea Iannone en el equipo oficial de Ducati. El australiano consiguió unos resultados suficientemente aceptables siendo 18ª en Japón y 15º en Phillip Island y cosechó su primer punto en MotoGP.
Jones se enfrenta al GP de Australia a lomos de la Desmosedici GP16, una montura que no ha probado ya que cuando debutó en la categoría reina lo hizo con la GP14 que tenía por aquel entonces Barberá. El australiano se sube a una moto con la que el mundialista Abraham sufre por entrar en la zona de puntos por lo que no pueden pedírsele unas marcas excelentes a un recién llegado.
Sin embargo, en vista de sus resultados hace dos temporadas no parece que el australiano vaya a tener problemas de adaptación. Un tema muy candente esta temporada en MotoGP, tras el debut de un piloto que abrió el debate de si sería bueno implementar en el motociclismo una licencia especial para correr en MotoGP garantizando la calidad de la categoría.