Con sólo cuatro carreras a la vista y una renta de tan sólo 16 puntos al frente de la clasificación general del Campeonato del Mundo de MotoGP, Marc Márquez se enfrenta al que quizá sea el final de temporada más difícil de sus últimos años.
Por suerte, la gestión de la presión no es demasiado problema para un piloto que sabe lo que es ganar un campeonato carrera a carrera y para el que, por suerte o desgracia (según se mire), no tiene ni idea de lo que es sacar la calculadora.
"Tenemos confianza, pero debemos estar concentrados y preparados para cualquier cosa"
Hasta ahora, correr sin pensar demasiado en la tabla de puntos le ha servido a Márquez para recuperar la ventaja perdida tras el abandono del Gran Premio de Gran Bretaña. Las victorias conseguidas en Misano y MotorLand reflejan la mejor cara de un piloto capaz de saber cuándo debe arriesgar y cuándo quedarse en el box si es necesario.
"Quedan cuatro Grandes Premios esta temporada y debemos dar el 100% en todos, empezando por los próximos tres", afirma el dorsal número 93. "Estas carreras son siempre exigentes por los cambios horarios y por las condiciones, y este año con el campeonato tan ajustado serán todo un reto".
A excepción de la carrera de Silverstone, Márquez lleva encadenando buenos resultados desde el Gran Premio de Catalunya. Un total de cuatro victorias y tres podios en las últimas ocho carreras delatan una tendencia que pocos podíamos imaginar a principio de temporada, cuando la Honda RC213V le puso las cosas más complicadas de la cuenta al de Cervera.
Y no ha sido fácil, porque tal y como comenta él mismo han pasado por carreras rápidas en seco con elecciones arriesgadas de neumáticos y gestiones impecables de pruebas en mojado: "Hemos hecho un buen trabajo gestionando las diferentes condiciones y circuitos, lo que nos da confianza y demuestra que estamos en un buen nivel en cualquier trazado".
Ahora Marc se enfrenta a Motegi, una pista complicada donde las Yamaha suelen funcionar muy bien pero donde el de Honda ganó en 2016 y se coronó campeón por dos veces. "Cada temporada es distinta y tenemos que seguir concentrados y preparados para manejar cualquier situación", añade, subrayando que "debemos trabajar duro en la puesta a punto para encontrar un buen compromiso para las fuertes aceleraciones y frenadas".
Como siempre, en casa de Honda, Márquez buscará una nueva victoria. Pero con cuidado, porque entre los laureles y perder las opciones al título hay una línea muy delgada.
Fotos | Repsol