La moda de que los fabricantes hagan motos exclusivas en las que la gente pueda optar a la tecnología de competición a golpe de talonario parece que también entra en el punto de mira de los austriacos de KTM. Y es que la marca naranja, que se incorporará a MotoGP en el 2017 estudia lanzar una réplica de la KTM RC16 (nombre de la MotoGP que está preparando) pero para uso en exclusivo en circuitos.
Pit Beirer tiene muy claro que la escalada de potencia actual en motos de calle no tiene sentido para KTM y por ello, no habrá ninguna moto que sustituya a la ya desaparecida KTM RC8R. En su lugar lanzarían una serie limitada de entre 150 y 200 KTM RC16 y que, fieles a su eslogan Ready to Race, contaría con toda la tecnología que aplicarían en su moto de competición y estaría en la calle para la segunda mitad del 2018.
Es decir, partiendo de la base de que lógicamente llevará un chasis multitubular y suspensiones WP (que se están desarrollando ya en Moto2 en la montura de Johann Zarco), iría animada por un motor V4 así como un cambio seamless y válvulas neumáticas, algo que no se pudo incluir en la Honda RC213V-S por su condición de moto homologada para utilizar en la vía pública.
El precio que se baraja para esta moto es de aproximadamente unos 140.000 euros, más cara que la Ducati Desmosedici pero teóricamente más barata que la Honda aunque hay que tener en cuenta dos detalles muy importantes como son lo que cuesta homologar hoy en día una moto teniendo en cuenta la normativa tan restrictiva en cuanto a emisiones y ruidos (algo por lo que Ducati tampoco tuvo que pasar en su momento) y también el resto de elementos necesarios para el día a día.
Vía | Speedweek