Hace unos años cierto personaje, movido por un scooter trucado y por las hormonas, conducía sin permiso y de forma irresponsable por cierta ciudad. Fue detenido por la Policía Local del lugar y cuando se dio cuenta del marrón en el que se había metido se movió de forma violenta rompiendo la tibia a uno de los agentes. Te acabas de coronar, pensé. Eso es más o menos lo que viene a la cabeza cuando ves “héroes” como el que protagoniza la estupidez de la semana.
Resulta que el señor J.G.F, a mediados de septiembre, se marcó toda una aventura con un par de amiguetes circulando en zig-zag por la M30 de Madrid. Pues bien, tras la investigación pertinente y unos meses después han conseguido localizar esa Yamaha R6 en carenados de circuito, sin luces ni placa de matrícula.
Al más puro estilo Ghost Rider, pero con una diferencia fundamental: la estupidez. Porque hay que ser realmente estúpido e irresponsable para salir a carretera abierta de esta forma, con un vehículo ilegal, en manga corta y chanclas y, para terminar de rematarlo y coronarse, hacer una peineta a la cámara del radar. El mismo, por cierto, que finalmente ha propiciado su detención.
Vía | El Mundo