3.400 multas en una sola semana. Es la cifra que avala a la Dirección General de Tráfico (DGT) para instaurar este verano los radares de construcción y obra, que sin ser nuevos, son un arma para combatir las más que habituales infracciones en estos tramos.
La técnica testeada en septiembre del 2022 reveló que eran demasiados los conductores y motoristas que no respetaban la velocidad durante los tramos de obra. Pues radar al canto, así que la DGT los está poniendo en marcha este mismo verano.
158 siniestros en zonas de obras avalan a la DGT para poner radares móviles en zonas de obras
Muchas👷👷♀️trabajan en la limpieza y conservación de la #carretera. Su seguridad depende de ti🦺 🦺. Evitarás #atropellos y otros accidentes si:
— Dir. Gral. Tráfico (@DGTes) August 3, 2023
👀extremas la precaución
🚗reduces #velocidad
🚧respetas la señalización 🚧
↔️guardas la #DistanciaLateral ↔️ pic.twitter.com/rPkNC905jz
Los operarios que trabajan a pie de carretera están en constante peligro. Un despiste o un exceso se puede pagar con la vida; así que limitar la velocidad en estos puntos críticos es algo obligatorio, y siempre señalizado sobremanera con marcas viales y señales amarillas. Pero no suficiente.
A pesar de ello, los accidentes siguen sucediendo. Los datos demuestran que los conductores siguen sin respetar en muchas ocasiones los límites en estos tramos. Eso llevó al organismo dependiente del Ministerio del Interior a instalar radares en septiembre de 2022 para probar la efectividad.
En una sola semana llegaron a multar a 3.400 coches y motos por saltarse los límites de velocidad temporales en estos tramos. Fue el precedente y el aval para que este verano se instalasen y empezasen a sancionar aún más.
Además, según los últimos datos del Registro Nacional de Víctimas de Accidentes de Tráfico, en 2021 hubo 158 siniestros en zonas de obras.
No son radares nuevos, como están asumiendo muchos medios de comunicación. Se tratan de radares móviles enclaustrados en cajas que se sitúan en zonas de obras con límites de velocidad reducidos. Lo que ya conocíamos, pero que ahora se disponen en estos tramos restringidos.
Es decir, que de los 545 cinemómetros móviles que tienen, estos se despliegan convenientemente en estos tramos de obras, por lo que no son de obra ni nuevos, sino que se colocan en ellas. Al ser móviles estos radares no siempre se avisarán con antelación.
Lo que sí es cierto es que la DGT ordenó a la Agrupación del Tráfico de la Guardia Civil colocarlos específicamente en zonas de mantenimiento a lo largo de este 2023, y parece que este verano ha sido el elegido.
Las multas por saltarse estos límites van desde los 100 hasta los 600 euros, con una posible pérdida de hasta seis puntos del carnet de conducir.