A los 22 años uno puede cometer muchas locuras, pero una de las más graves probablemente sea escapar de la policía en pleno 2024. Con los medios y formas, es difícil darse a la fuga, ni siquiera en moto. Y casos como el de hoy dejan vídeos épicos para el recuerdo.
El protagonista de hoy, de 22 años, no se detuvo cuando los policías encendieron las luces. Por delante una persecución con el Pegasus americano que termina de una curiosa manera: con un cabreo monumental.
40.000 euros de fianza por escapar en moto como un piloto de MotoGP
Las persecuciones policiales en moto siempre son curiosas. Y hay pilladas que pasan a la posteridad, como la de este chaval de 22 años que, recién estrenada su Aprilia, es cazado por el helicóptero de la policía de Nueva Jersey.
Su nombre es Austin Schwartz, de 22 años. Los agentes encendieron las luces para darle el alto por su conducta temeraria, pero hizo caso omiso. Empieza una persecución épica con helicóptero de por medio. Y ese fue el detalle que obvió el joven piloto de la Aprilia. Porque no, nadie corre más rápido que un helicóptero. Ni siquiera una Aprilia de más de 100 CV.
No sabía que tenía al Pegasus yanqui encima de la cabeza, y el helicóptero persigue al protagonista mientras adelanta por el arcén a innumerables coches y motos de una manera terriblemente imprudente; giros indebidos... Y mucho más. Todo grabado, evidentemente.
En un momento determinado incluso llega a saltarse un semáforo en rojo y casi lo atropella otro vehículo. De esa se libró de milagro, pero ya no pudo rectificar su trayectoria y acabó chocándose con otra 'pick-up'. Al suelo, accidentado... ¡Y cazado!
Tira el casco, enfurecido. Sabe que encima de él está el helicóptero de la policía. Inmediatamente, apaga la moto, saca el móvil como si no pasara nada y de repente, aparece la policía; engrilletado.
Pero lo peor estaba al caer, porque el tipo terminó en la cárcel con una fianza de 40.000 dólares por imprudencia temeraria, escapar de la policía y varios delitos más.
Caso similar sucedió en España, donde el poder de Pegasus es hipnótico, y ni las motos más ágiles se escapan de él. En aquel caso, un hombre con una Suzuki GSX-R se intentó escapar temerariamente y acaba por los suelos. Surrealista; pero nuestros medios nada tienen que envidiar a los de los americanos.