Pongámonos en situación. Sales con tu quad a dar una vuelta, a descubrir y a explorar un poco el entorno que te rodea. A divertirte un rato por playas alejadas de la mano de Dios, donde los turistas nunca llegan y sólo conocidas por los lugareños. Es un fin de semana más, un rato más respirando el aire del océano mezclado con barro. Hasta que te encuentras con algo que no suele estar allí. Una silueta de varios metros y angulosa aparece en mitad de la arena. ¿Hora de llamar a Iker Jimenez? No, tranquilos. Parece ser sólo con container.
Pero la curiosidad, obviamente, te está matando y decides abrir para echar un vistazo. Lo que te encuentras es lo último que habrías pensado: una Harley-Davidson en “casi perfecto” estado. Esta es una historia real, la de Peter Mark, un canadiense que se encontraba en la playa de Graham Island cuando se encontró con semejante sorpresa. Al comprobar la matrícula de la moto las autoridades pudieron llegar a la conclusión de que era una de las unidades de la prefectura de Miyagi, gravemente afectada por el tsunami de Japón del año pasado.
Al parecer, la fuerza del agua llevó el container más allá de la isla y las corrientes del océano se encargaron de hacer el resto. Sabiendo el número de la matrícula en estos momentos se está buscando a su respectivo dueño mientras la máquina sigue descansando en el lugar en que se encontró pues el acceso a la playa es realmente complicado.
Vía | Visordown