Manuel Poggiali fue uno de los pilotos con más talento y más proyección de principios de los años 2000, consiguiendo alzarse con dos títulos mundiales en 2001 y en 2003 en las categorías de 125 cc y 250 cc respectivamente. Sin embargo, el que estaba llamado a ser uno de los pilotos más importantes de la década pronto se diluyó poco a poco.
Ahora, 15 años después de su segundo y último título mundial, Manuel Poggiali va a volver a subirse en una moto de carreras a nivel mundial y lo va a hacer ni más ni menos que en la mítica carrera de las 24 Horas de Le Mans, donde pilotará una Ducati.
Un bicampeón del mundo corriendo en resistencia
Con esta participación, Poggiali debutará en la que es una de las pruebas de resistencia más prestigiosas y exigentes del mundo y así mismo, debutará en la disciplina. Esa es precisamente una de las expectativas más grandes que tiene el piloto de San Marino.
En una entrevista concedida al medio italiano Corsedimoto, Poggiali reconoce que las dos cosas que más le llaman la atención son la de pilotar de noche en condiciones de frío y con iluminación reducida y también la de gestionar el hecho de estar tanto tiempo sobre la moto. ambién ha hablado sobre la necesidad de adaptarse a la puesta a punto y compenetrarse con sus compañeros de equipo.
Acostumbrado a carreras cortas en su época activa, Poggiali deberá mantenerse en pista al menos ocho horas, ya que la estructura en la que correrá, el Special Team Ducati by Z Racing, cuenta con tres pilotos. Además, deberá mantener el tipo en todas las sesiones de entrenamientos previas a la gran cita de la resistencia que se disputará a finales de abril.
Para poder llevar a cabo una buena actuación, el sanmarinense ha afirmado estar completando varias sesiones de preparación física al día, ya que es consciente del gran esfuerzo que una carrera así conlleva para un piloto y más todavía para uno que no está acostumbrado a ello. Eso sí, sin olvidar su vida familiar y otras obligaciones personales.
Poggiali es consciente de la expectación que genera su presencia en las 24 Horas de Le Mans, pero aun así reconoce que siendo su primera vez y estando en un equipo pequeño y familiar, debe ser realista y mantener un perfil bajo. En cualquier caso, el retorno a la competición de un piloto de su talla siempre es buena noticia y seguro que puede cuajar un buen papel teniendo en cuenta su talento sobre una moto.
Fotos | Manuel Poggiali, MotoGP