Las Yamaha fueron las grandes protagonistas del test del Misano. El equipo oficial puso en pista muchos nuevos componentes de la moto de 2020 y las conclusiones son un poco contradictorias de momento. Mientras que Valentino Rossi parece optimista, a Maverick Viñales le huele a chamusquina la nueva M1 de los japoneses.
Las motos de los diapasones dominaron por completo los dos días de test de Misano. De hecho las cuatro Yamaha estuvieron entre los cinco mejores tiempos en los dos días de pruebas, con Fabio Quartararo marcando el mejor crono e incluso quedándose a milésimas del récord del circuito, que ostenta Jorge Lorenzo con la Ducati.
A Rossi le sorprende no tener problemas de agarre
Tanto la moto de este año, la del Petronas, como la del 2020, la del equipo oficial, se comportaron bien en Misano, y eso hace ser optimista a Valentino Rossi. 'Il Dottore' explicaba tras las pruebas que "era bastante pesimista antes del test porque el año pasado tuvimos muchos problemas, pero ahora pienso que podemos hacer una buena carrera".
El italiano incluso se sorprendía de que "todos hablaban de problemas de adherencia, en cambio yo he ido bien, especialmente hoy por la mañana, cuando la situación mejoró". Y es que cuando hay problemas de agarre la primera moto que suele pagarlo es la Yamaha, que lleva años luchando contra ese enemigo.
Sobre los componentes de 2020, Rossi cree que "tanto el basculante de carbono como el escape han mejorado la moto, que ahora es más estable, con más aceleración y más manejabilidad. Hemos mejorado tanto la adherencia como la aceleración". Eso sí, respecto al nuevo motor, que ya se estrenó en Brno, hay más prudencia.
Sin embargo, mientras que todo el optimismo, aunque sea moderado, en el lado del box de Valentino Rossi, la parte de Maverick Viñales es bastante más cauta. El piloto español explicaba que "la nueva Yamaha no está al nivel de la Honda o la Ducati, y creo que Rossi piensa más o menos lo mismo que yo al respecto".
Viñales dio un baño de realidad a la Yamaha expresando que "no me siento del todo bien con la nueva moto, las novedades van más o menos como lo actual, y con el motor me faltan más vueltas para valorar, pero en general no se trata del paso adelante que queríamos dar, se puede ir más fuerte que esto".
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— Monster Energy Yamaha MotoGP (@YamahaMotoGP) August 26, 2019
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La expectación acerca de la M1 que pueda hacer Yamaha de cara a la temporada 2020 es máxima porque se sospecha que podría ser la última moto que pilote Valentino Rossi en MotoGP. Aunque ni mucho menos es oficial, y conociendo a 'Il Dottore' no sería tan raro que renovase, mucha gente en el paddock da por hecho que Rossi, a sus 41 años, dejará MotoGP a finales de 2020.