Triumph podría llegar a MotoGP en 2019, ¡como suministrador de motores de Moto2!
Detrás de las cámaras, Dorna está trabajando intensamente para ver qué pasa con el Campeonato del Mundo de Moto2. La categoría intermedia se enfrenta a algunos grandes retos a medio plazo y quizá el más importante es ver qué fábrica será la nueva suministradora de motores. El acuerdo con Honda acaba en 2018 y parece ser que Triumph sería la encargada de sustituir al gigante japonés.
Vale, sí, lo sé. Esta es una noticia de esas que pueden parecer de El Mundo Today pero no, tiene toda la pinta de ser algo real y sólo hay que ver las fuentes de las que procede. Pesos pesados internacionales como Asphalt and Rubber, Speedweek, Bike Sport News y MotoMatters han sido quienes han soltado la liebre, y parece que con fundamento.
La posibilidad fundada de Triumph en Moto2
Aunque el contrato entre Dorna y Honda podría tener muchos visos de renovarse al finalizar el plazo que les une hasta 2018, lo cierto es que HRC tendría muy pocas opciones de renovar. Además de otros fabricantes con mucho interés para entrar en el circo, Honda ha cancelado la producción de sus CBR600RR, lo que quiere decir que ya no habrá motores que suministrar.
Se ha especulado durante un tiempo con que el reglamento de Moto2 pasase de un suministrador único a un abanico abierto de motores siempre que cumplieran ciertos requisitos, pero esta idea es totalmente contraria a la que quieren los equipos. Correr en Moto2 es más barato que en Moto3, en gran medida por un reglamento con motores cerrados y precintados sin posibilidad de desarrollo.
La idea de que Triumph pueda entrar en Moto2 sería una noticia épica para el pequeño fabricante británico
Entre los candidatos como nuevo suministrador de motores estarían Kawasaki (la única interesada realmente en continuar en SSP 600 y a quien Honda ganó la partida para el primer contrato de Moto2), MV Agusta (con su tricilíndrico de 675 cc), KTM (con el nuevo bicilíndrico LC8c que le iría de perlas a su nueva Moto2) y Triumph.
La decisión de Dorna se centra básicamente en dos factores: rendimiento y fiabilidad. Con sólo dos cilindros el motor austríaco es toda una incógnita por su novedad y los de Kawasaki y MV Agusta cuestionados por su fiabilidad, Triumph estaría a un paso de conseguir firmar el mejor contrato de su vida. ¿Pero con qué?
En Triumph aún mantienen vivo el tricilíndrico de 675 cc que equipa a la Daytona 675 R que sigue corriendo por los circuitos de todo el mundo. Esta temporada incluso Luke Stapleford logró meter a la moto británica en la pole del Campeonato del Mundo de Supersport, pero no sería ese el propulsor utilizado para mover las Moto2 de 2019. Ni se le parece.
Ya sabes que en Hinckley tienen preparado un nuevo modelo de su nueva Street Triple que se desvelará mañana, 10 de enero. El nuevo motor huye de los 675 cc, incrementando su cilindrada para cumplir con solvencia la normativa Euro 4. A rebufo de este nuevo modelo en Triumph podrían estar desarrollando una nueva deportiva que tomase como punto central el nuevo motor de tres cilindros pero con algunos cambios que harían más próximo su adaptación a Moto2.
De todos los fabricantes que se barajan, los de Hinckley podrían ser los mejor posicionados para suministrar los motores de Moto2
Una de las exigencias de los ingenieros de Moto2 sería que los soportes del motor que en el 675 están en la culata pasarían a reubicarse sobre el bloque. Unos soportes en el extremo superior del motor no dejan apenas margen a los desarrolladores de chasis de competición para jugar con la rigidez, así que en Triumph habrían cambiado estos puntos de agarre.
Otro de los puntos fuertes de utilizar un motor tricilíndrico vendría asociado a las dimensiones. El salto cuantitativo de Moto3 a Moto2 es gigantesco porque no hay color entre el tamaño de una moto y otra. Las Moto2 son motos gordas de verdad y en gran parte es culpa de un cuatro cilindros demasiado ancho para lo que son hoy en día las motos de carreras. Un tricilíndrico compacto como el empleado por Triumph permitiría motos más pequeñas y con más espacio con el que jugar.
Por contra, los 675 actuales de Triumph adolecen de una cierta fama de debilidad mecánica en carreras. El incremento de cilindrada (rumoreada sobre los 750 o 765 cc) vendría a ofrecer también una mayor resistencia a las averías, pero el fabricante británico podría ser más estricto con la monitorización de los motores empleados en Moto2 y reducir los intervalos de mantenimiento por debajo del establecido en tres carreras actual.
Saldremos de dudas en un primer momento al conocer la nueva Street Triple y ver cómo es su nuevo propulsor, pero definitivamente se nos despejarán las dudas cuando unos pocos meses después Triumph desvele (si es que llega a hacerlo) su nueva deportiva. Si a lo largo de 2017 no tenemos noticia sobre ningún modelo R de Triumph, entonces empezaremos a pensar que todo fue un sueño, porque el motor debería empezar a probarse en prototipos de Moto2 a lo largo de 2018.
Fotos | Triumph