Álvaro Bautista ha sido uno de los protagonistas indiscutibles de la temporada 2022 que ha llevado a Ducati, junto con Pecco Bagnaia, a alcanzar la tan ansiada doble corona mundial. En pleno descanso invernal, mientras se gesta la próxima temporada, ambos protagonistas ya tienen sus deseos en marcha, y Ducati parece dispuesta a hacerlos realidad.
Bautista echa de menos una MotoGP, y así se lo ha hecho saber a Ducati, que parece estar manos a la obra para cumplir los deseos de su campeón de Superbikes. Bagnaia, por su parte, quiere explorar nuevos terrenos como las 8 Horas de Suzuka, algo que sería histórico para los italianos en caso de suceder.
Bautista echa de menos la MotoGP y Ducati prepara un equipo para las 8 Horas de Suzuka
Aunque la Ducati V4 R es posiblemente la Superbike más parecida a un prototipo de MotoGP, sigue siendo una moto de calle y Bautista echa de menos las sensaciones de las motos del mundial de motociclismo. Por eso ha pedido a Ducati volverse a subir a una MotoGP.
Con el simple objetivo de probarse y volver a sentir lo que es llevar una MotoGP, Bautista ha dicho a GPOne que es algo que ya está en marcha: “Lo hablé con Gigi Dall’Igna y Claudio Domenicali: me gustaría dar algunas vueltas con una moto de MotoGP. Hace bastante tiempo que no piloto una moto de MotoGP y echo de menos esa sensación, de potencia, la desaceleración de los frenos de carbono y la estabilidad de los prototipos”.
Las diferencias entre un modelo de moto y otro son abismales, empezando por la concepción y hasta por los componentes mucho más exigentes. Para el español, “la Superbike baila y se mueve, y tienes que bailar con ella”, mientras que de la MotoGP echa de menos esa “sensación de pilotaje completamente diferente”.
Sería una sensación totalmente distinta a la que tuvo en su última etapa de dos años en MotoGP, cuando pilotó las Desmosedici GP17 y GP18. Ahora es una moto ganadora, incluso la de los equipos satélites es mucho más competitiva que otras de fábrica.
Por eso, ahora quiere “hacer un test, solo por diversión”, descartando la opción del wildcard por el momento: “Es algo secundario, solo me gustaría experimentar las sensaciones que te da una moto de MotoGP. Sería muy bueno”.
La petición de Bautista ha sentado bien en Borgo Panigale, dispuestos a satisfacer a su campeón. En Italia, los medios ya aseguran que Ducati estaría preparando y coordinando el test privado con el talaverano para que se pueda volver a subir a una Desmosedici.
Junto con su petición, la de Bagnaia que quiere participar en las 8 Horas de Suzuka. Una carrera eminentemente japonesa que no entra demasiado en la concepción de Ducati, pero que ya ha puesto en marcha la maquinaria para hacerlo realidad también.
Gigi Dall’Igna está también dispuesto a concederle ese deseo a su piloto, tal y como desveló a As: “Es un sueño realmente agradable e interesante. Espero poder hacerlo realidad para él”. Deja la puerta abierta a que esto suceda, al menos en 2024, ya que este año es imposible dar a la luz al proyecto sin ciertas garantías, y de forma tan repentina. “Me gustaría construir un equipo para Suzuka, ¿2024?”, dejó caer el directivo.