Ayer, después de los primeros entrenamientos libres del Gran Premio de Catalunya, la chicane implementada en el último sector del circuito no acabó de convencer. Tras una reunión de última hora, todos los pilotos acordaron regresar a la variante que se utilizó el año pasado, la misma que la usada en Fórmula 1.
La primera consecuencia de este cambio ha sido que los tiempos conseguidos durante la jornada del viernes quedan anulados, jugándose ahora el paso a la Q2 en el caso de MotoGP únicamente a partir de la FP3. Según Loris Capirossi, las nuevas modificaciones obedecen a que "el trabajo no se había hecho de forma apropiada".
De vuelta a la configuración de la Fórmula 1
Este cambio de última hora devuelve al trazado catalán a la misma configuración que el año pasado se utilizó después del trágico accidente en el que Luis Salom perdió la vida. Aunque no es la mejor solución por la proximidad de un muro contiguo a la pista, los pilotos han preferido volver a este formato y, además, ganarle algunos metros a la escapatoria comiéndose parte de la pista y añadiendo grava para reducir la velocidad en caso de caída.
Ya están en plenos cambios de la chicane para volver mañana al trazado F1. @movistar_motogp pic.twitter.com/FGKMNcRCF8
— Izaskun Ruiz (@izaskunruiz) 9 de junio de 2017
Precisamente varios incidentes se vivieron en la jornada de ayer en este conflictivo punto. Loriz Baz o Álvaro Bautista fueron algunos de los afectados que vivieron la peligrosidad de la chicane quedando más o menos en medio de la pista. Valentino Rossi fue uno de los más críticos al mencionar que "para mí una chicane así no está al nivel de MotoGP, no es parte del circuito, es sólo un trozo de asfalto entre dos circuitos".