Extirpando muelas sin anestesia. Ese sería Andrea Dovizioso si fuese dentista, a la vista de lo que haría si tuviese potestad para ello. Nada menos que limitar las ayudas electrónicas al 50% de lo que hoy en día actúan, para de este modo ofrecer un mayor espectáculo y a la vez ser más demandantes a la hora de pilotar para los que forman la parrilla de MotoGP. Hay que decir que las palabras de Dovizioso tienen mucha lógica y dan que pensar, como ahora intentaré comentar.
Para el piloto HRC, es necesario que haya más probabilidades de batalla en la pista. Puede que le haya escocido ver cómo Ben Spies ponía tierra de por medio en Assen, o puede que realmente lo diga como algo que siente de verdad. Lo que si es verdad es que tanta ayuda electrónica hace que pilotar una MotoGP sea relativamente más fácil hoy que hace 5 años, y esto es algo que no me invento yo, algo que se comenta.
Reconoce que la electrónica es necesaria (0% de electrónica haría insufrible controlar esas máquinas) y que es muy interesante para las motos de calle, pero que una rebaja en la cantidad de asistencia que recibe el piloto a la hora de abrir gas igualaría un poco más las cosas en las carreras. Y yo estoy de acuerdo, vale la pena dejar de confiar el todo por el todo a la electrónica (no es que cierren los ojos y que sea lo que sea, pero hay pilotos que se apoyan más en el CT que otros: Rossi más, Stoner menos por ejemplo).
Lo que realmente me da que pensar es qué pasaría si reducimos en un 50% la asistencia del CT. ¿Se igualaría la parrilla? ¿Veríamos cómo destacan pilotos habitualmente de medio pelotón? ¿Volveríamos a asistir a apariciones como las de Garry MacCoy en 500cc? Muy posiblemente, la verdad, y podría ser algo a tener en cuenta en un futuro. Si son 17 pilotos en parrilla, qué mejor que tener más porcentaje de “posibles” para optar por las victorias. Me parece un tema controvertido, pero estaría bien saber qué opináis al respecto.
Vía | Bike Sport News