Lo que estas viendo no es producto de tu imaginación, si no de la de un usuario del foro Do the Ton, que no hace mucho decidió que su modesta Kawasaki G3SSB necesitaba una restauración a fondo, y como no podía ser de otra manera el resultado final tenía que encajar con la estética que su propio dueño califica como Café Racer.
La moto original llegó a sus manos hace un par de años, y tras un pequeño repaso de mecánica se puso en marcha. Durante seis meses fue la moto de uso diario de Mitey F, su propietario. Pero claro, una moto original, original no encajaba, con lo que le hizo una primera transformación instalándole un asiento de fabricación propia hasta que el propietario se hizo con otra moto y le llegó el momento de una reconstrucción total a esta.
En Do the Ton podéis ver un hilo bastante completo con el paso a paso de todo lo que le hizo a la moto. Una secuencia que nos muestra que salvo un repaso al grupo térmico y a la culata de mecánica no se le ha hecho mucho, pero en la parte estética si que se ha echado el resto.
A mi me encanta sobre todo la parte de la restauración de las ruedas, que pasan de ser unas ruedas normales de radios a algo mucho más interesante. También llama la atención la parte del depósito, que con muy poco trabajo queda prácticamente perfecto en ese verde Kawasaki.
En definitiva otra de esas pequeñas motos que demuestran que con cariño y buenas manos se puede conseguir motos muy personales y resultonas. Y no hace falta que la base sea una Triton para que tu Café Racer llame la atención allí por dónde pase. Mi enhorabuena al propietario.
Vía | 8 Negro (Atención blog con contenido para adultos)