La Dirección General de Tráfico está enfadada con el público motorista. No es ninguna novedad. Pere Navarro ha vuelto a poner en la mirilla al colectivo después de los desastrosos números de siniestralidad en 2022: 300 muertos en carrretera encima de una moto. "Un disparate", valoró.
Tráfico sabe perfectamente cuál es el perfil del motorista. Y no, no es culpa de los scooters de la ciudad. Ni siquiera del motero de trail que sale a disfrutar. El perfil tiene una edad determinada, y Navarro es consciente de que España tiene que parar esta sangría numérica. Aquella "generación maldita".
En 2024 las cifras de siniestralidad en moto no mejoran
Negar la evidencia sería un error. España es un país motero. Es algo que sabemos los motoristas españoles, algo que se respira en el aire en cada Gran Premio de motociclismo, y hasta Pere Navarro lo dice: "La moto es inherente a nuestro país por nuestro carácter latino y por el clima", justificó el dirigente de Tráfico.
Al ser uno de los países más propicios por "carácter" y "clima", también somos una de las referencias en seguridad vial... O no tanto. Los casi 300 fallecidos el año pasado hablan por sí solos, y eso impide a España tomar otros países modélicos: "En otros países como Suecia o Dinamarca, por ejemplo, que son nuestros referentes en materia de seguridad no tienen motos, así que no podemos estudiar sus ideas".
"En España hay 5,5 millones de motos", valoraba Navarro, que pregona que "España es referente en las motos", ejemplificando con que " incluso Bruselas nos ha pedido que ayudemos a otros países como Grecia en materia de seguridad de las motos. Pero aun así tenemos un problema de motos de primera magnitud en motos. Solo el año pasado hubo 300 motociclistas muertos en carretera y esto es un disparate".
Este "disparate" tiene protagonistas, con una horquilla de edad definida que la DGT tiene bien localizada: "El perfil se repite, una persona de entre 40 y 50 años, que sale en fin de semana y que piensa que a su edad, ya una vez que tiene hijos se merece de alguna manera comprarse una motocicleta de alta cilindrada y sale a la carretera", mencionaba.
En consecuencia, para paliar los efectos de semejante "disparate", según Navarro, Tráfico ya está trabajando con asociaciones de motoristas, ha anunciado. Y anuncia: "Hemos instalado señalización específica y para este verano se utilizarán motos camufladas de la Guardia Civil. Con ello buscamos evitar situaciones como la conducción temeraria".
Otra idea que se baraja en el seno de la DGT desde hace años es la obligatoriedad del airbag. Algo que los motoristas de la Guardia Civil de Tráfico ya tienen (o deberían tener) en su equipamiento, para tomar ejemplo. "En este sentido, no obstante, espero también que el airbag para motoristas sea uno de los grandes saltos adelante en seguridad", dejó caer.