... está claro que no se puede rechazar. Y este viernes recibí el soplo que iba a salir de un concesionario una Ducati Desmosedici RR. Si, efectivamente la MotoGP de calle de la que sólo se han fabricado 1.500 unidades, de las que están todas vendidas, y entre sus orgullosos propietarios se encuentra Tom Cruise y Jay Leno.
La verdad es que no sabría por dónde empezar a contaros. La MotoGP de la que deriva, es la más grande de la parrilla, pero sin embargo, es muy compacta. Sus formas redondeadas, junto con ese frontal tan adelantado sobre la aleta, y el colin, muy retrasado, consiguen engañar a los ojos.
Es una moto sin concesiones. Todo en ella está estudiado para ser la moto más radical que puedas matricular. Destacan su impresionante horquilla, con depósito separado, y su mastodóntico basculante trasero. La moto se convierte en una sinfonía de carbono visto y carbono pintado. Todos, absolutamente todos los detalles está cuidados con esmero; desde el impresionante cuadro de mandos, hasta la bomba de freno con ajuste remoto desde el embrague, pasando por las manetas con articulación para evitar su rotura en caso de caída (aunque si se va al suelo, lo de menos serán las manetas).
La parte trasera, con ese escape saliendo por la parte superior, es algo que nunca había visto y que seguramente no volveremos a ver en una moto. Y el sonido que emana de ellos, sobre todo si el escape colocado no es el de serie, hace que todo a tu alrededor retumbe. He tenido la oportunidad de escucharla a 5.000 vueltas, no quiero saber cómo suena a régimen máximo, situado en torno a 14.500 r.p.m.
Bueno, mejor os dejo con la galería completa. Yo voy a intentar dormir y volver a soñar con ella, como desde hace dos noches. ¿Habrá oportunidad de probarla?