El Campeonato del Mundo de Superbikes está emocionantísimo, de eso no hay duda. En cada carrera se aprieta más las clasificaciones y Max Biaggi ha visto como su ventaja ha decrecido en 38 puntos en solo dos citas (cuatro carreras).
Pero este año no lo está teniendo nada fácil con la meteorología. Si a el fiasco de la cancelación de las carreras del templo de la velocidad, Monza, unimos lo que ha ocurrido este fin de semana en Silverstone, algunos pilotos del campeonato han lanzado duras críticas a través de las redes sociales.
Centrémonos en las carreras del domingo pasado. En la primera de ellas, la carrera fue declarada en mojada pero no llovía y los pilotos decidieron salir con neumáticos de seco, algo muy similar a lo que ocurrió en la primera prueba del CEV este año con la diferencia de que en España, todas las carreras se declaran en mojado si no me falla la memoria.
Tal y como pasa con Murphy, a las pocas vueltas comenzó a llover y los pilotos tuvieron que afrontar el resto de las vueltas con slicks, con el consiguiente peligro que esto conlleva. Sólo hay que ver cómo entraron Ayrton Badovini y Jonathan Rea por línea de meta: por los suelos.
Como este año no hay dos motos por piloto, no se pueden hacer carreras flag to flag y así poder cambiar de neumáticos usando otra moto. Y entrar en boxes para cambiar ambas ruedas no es factible porque las motos no están preparadas para ello como las del mundial de resistencia y se pierde demasiado tiempo.
Para colmo en la segunda, una combinación de agua y presencia de aceite en pista hicieron que una gran cantidad de pilotos se fuesen al suelo. Al final, no se sabe si por las protestas de Carlos Checa y Tom Sykes, decidieron sacar bandera roja y poner fin a aquella procesión de percances.
Precisamente el piloto español Carlos Checa lo contaba de una forma muy explícita:
Las condiciones de las carreras de hoy eran peligrosas. Sobre todo en la primera carrera. Correr bajo la lluvia con gomas slicks no favorece a nadie, aunque pueda resultar espectacular para los aficionados. Antes de que comenzara a llover estaba muy fuerte, todo iba bien pero después las sensaciones no eran las mismas, había zonas de pista más mojadas que otras y me ha faltado confianza.
Aflojé un poco penando que perdería un par de plazas, pero me han adelantado cinco o seis. Cuando he visto de la forma que luchaban los cuatro de cabeza he preferido no mezclarme, Quinto no era mal resultado teniendo en cuenta las condiciones de carrera y que tenía detrás a los rivales en la batalla por el título.
En la segunda carrera la bandera roja era obligada. No sólo había aceite en pista sino que no se veía bien, como si alguno fuera con motor a mezcla o con diesel. No se podía correr así y la prueba es que nos hemos caído siete u ocho.
Había perdido terreno al principio pero he recuperado después para llegar a espaldas de Berger que era quinto. He visto que había aceite en pista y he ido largo para evitarlo. después he levantado la mano para indicar a dirección de carrera que las condiciones eran demasiado peligrosa y he caído a continuación.
Todo hubiera resultado más sencillo con dos motos a disposición. Las carreras ‘Flag to Flag’ (bandera a bandera), entrando a cambiar de moto cuando lo consideras oportuno, funcionan en MotoGP. Nosotros pedimos tenerlas, pero los organizadores se echaron atrás por una cuestión de costes. Pero al final se ve que este ahorro es inexistente.
El balance no es del todo malo, hemos recuperado algún punto en la clasificación. Ahora hay que concentrarse en la próxima carrera en Rusia.
¿Solución? Pues se me ocurren varias. Para el caso de la primera carrera, si la totalidad de la parrilla ha salido con neumáticos slick y comienza a llover, parar la carrera o en su defecto, permitir que se coloquen sistemas de cambio rápido de ruedas al no existir una segunda moto porque, ¿de qué sirve ahorrar si acabas cayendo y destrozando la moto como le paso a la Kawasaki de Tom Sykes?
Para la segunda carrera ya es un poco más complicado y únicamente que los comisarios y Dirección de Carrera estén muy atentos a las posibles fugas de líquidos en carreras en agua. Y que los pilotos, en caso de rotura, abandonen las trazadas inmediatamente, nada de intentar llegar a boxes en la moto poniendo en peligro a los demás.
Y por supuesto, no sólo parar la carrera si se caen los grandes, que los de la mitad para atrás de la parrilla no son inmunes al aceite y también se caen por lo mismo.
Vía | Althea Racing Ducati Team
En Motorpasión Moto | SBK Gran Bretaña