Durante las olimpiadas, surgió en mi casa con mi mujer la pregunta de por qué no estaban considerados los deportes del motor como disciplinas olímpicas. La respuesta correcta no la sé pero si me puedo hacer una idea de por donde pueden ir los tiros.
Lo primero es quién sería merecedor de la medalla, la moto/coche o el piloto. Sin un buen vehículo el piloto no tiene nada que hacer y al contrario, sin un buen piloto poco puede hacer la máquina frente al resto aunque sea muy buena. Venga, va, una solución salomónica: Kalisse para todos una medalla para el piloto y otra para la máquina.
¿Pero y la escudería y mecánicos que atienden al piloto? De dónde los sacamos. De los distintos campeonatos sería injusto porque entonces ellos también merecen una medalla. Y si son externos, se pierde el feeling que tienen con los ingenieros…. mal rollito…
Pero demos un paso más allá porque hasta qué punto la victoria de alguien puede estar condicionada por un buen rendimiento mecánico. Haciendo memoria creo que las máquinas más completas que disputan las olimpiadas son las bicicletas y los barcos, no recuerdo ninguna otra disciplina con máquinas más complejas que puedan echar por tierra el trabajo de un deportista.
¿Vosotros creéis que debería haber una disciplina olímpica para los deportes del motor? Como estáis igual de enfermos que yo, seguro que me decís que sí.
Pues esa misma pregunta se la hicieron no hace mucho Jonathan Rea y John MacGuinnes. Y dejando correr la imaginación, os dejo con un vídeo que lo relata de una magnífica manera con imágenes.
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