La temporada de arrase que está completando Álvaro Bautista en su debut en el mundial de Superbike sigue levantando ampollas. El talaverano ha ganado las once primeras carreras del certamen a lomos de su Ducati Panigale V4 R y tiene prácticamente sentenciado el campeonato tras tan solo cuatro fines de semana.
Kawasaki y Jonathan Rea están siendo las víctimas de todo esto. Después de cuatro años de dominio absoluto, en los que el norirlandés se convirtió en tetracampeón del mundo y, por palmarés, en el mejor piloto de la historia de Superbike, ahora están siendo arrasados por Ducati y Álvaro Bautista, algo que no sienta del todo bien.
El dominio de Bautista, "un desastre" según Rea
Por eso en Kawasaki ya se han puesto manos a la obra y están preparando "una moto extrema de serie" para batir a Ducati en 2020. Así lo ha confirmado Ichiro Yoda, ingeniero de la casa japonesa, quien afirma que "la solución sería diseñar una moto desde cero. Necesitamos ser más competitivos y pensar en una moto similar a una MotoGP".
Yoda de paso ataca a Ducati por la potencia de su motor y califica a la Panigale V4 R como "una moto de MotoGP". Aprovecha Yoda la coyuntura para pedir a Dorna que "repiense su filosofía, qué dirección debe tomar el campeonato. Dijeron que querían más motos en la parrilla. Por ello redujeron los costes para ayudar a los equipos privados, pero todo ha cambiado con la llegada de esta Ducati".
En la misma línea va el propio Jonathan Rea, que en una reciente entrevista afirma que "el dominio de Bautista es un desastre para Superbike". El piloto español igualó en Assen el récord de once victorias consecutivas que había conseguido el propio Rea el año pasado, y podría superarlo si gana la primera carrera en Imola el 11 de mayo.
El vigente campeón explicaba sobre la Ducati que "su propia estrategia de márketing dice que es una MotoGP. Lo dijo Ducati cuando presentó la moto. En este Mundial se trata de equilibrar y de hacer que los equipos privados sean competitivos. Estoy preocupado por el futuro", a la vez que explicaba que no hay rivalidad con Bautista porque "está muy lejos".
La polémica en torno a la Panigale V4 R está en que el límite que establece la FIM para homologar motocicletas para el campeonato de Superbike es de 40.000 euros como precio de venta al público, y la moto de Bautista está en 39.990, sin extras. Por su parte, la Kawasaki ZX-10RR se queda en 27.675 euros.
De este modo Ichiro Yoda descarta alcanzar a Ducati esta temporada y plantea que "en la historia del campeonato del mundo de Superbike, las motos siempre han estado basadas en motos de serie que estaban disponibles a un precio razonable". Por eso, afirma que Kawasaki trabaja desde ya porque "si Ducati sigue con esta moto necesitamos una igual, no estamos aquí solo para participar".
Un posible retorno a MotoGP, descartado
Sin embargo lo que no aparece en el horizonte cercano de Kawasaki, al menos de momento, es un posible retorno a MotoGP. Así lo afirmaba Yoshimoto Matsuda, líder del proyecto en Superbike de la escuadra japonesa, quien se mostraba tajante al respecto: "MotoGP no es el camino correcto para nosotros".
Matsuda explicaba que "MotoGP es demasiado caro para Kawasaki, cuesta diez veces más que Superbike. Para competir allí necesitas 60 o 70 millones de euros, Honda gasta ahora unos 100". Por eso explica el japonés que no es posible convencer a la dirección ejecutiva de Kawasaki para retornar a la categoría reina.
Además, en palabras de Matsuda, Kawasaki "solo podría optar a quintos puestos en el Campeonato del Mundo de MotoGP", y afirma que en la dirección "esperan victorias, no importa en qué categoría. Es por eso que el Mundial de Superbikes tiene más sentido para Kawasaki desde un punto de vista financiero".
Kawasaki ya participó en el mundial de MotoGP a principios de siglo, entre los años 2002 y 2009, sin demasiado éxito. Los mejores resultados los obtuvo Shinya Nakano en 2004, acabando décimo en el mundial de pilotos e incluso consiguiendo subirse al podio en el Gran Premio de Japón, en Motegi, donde fue tercero.