Pues sí. No es un casco, ni un mono, ni un nuevo accesorio para la moto. La compra que todo motero que se precie debe hacer estas navidades es un simple bote de espray rojo. Sobre todo si con ello podemos contribuir a que, por fin, vaya creándose un auténtico estado de opinión masiva sobre la lacra de los guardarrailes.
Me he enterado por la revista Solo Moto de la existencia del colectivo protestARTE, cuya actividad consiste en pintar de rojo los guardarrailes como método de protesta ante la sangría a la que nos vemos sometidos anualmente los moteros desde hace ya demasiado tiempo, máxime cuando existen leyes que nos amparan al respecto: La sustitución de los guardarrailes está aprobada hace años por el congreso, pero no solo no se sustituyen sino que se siguen instalando los del modelo cuchilla. En algunos casos, los miembros de este colectivo incluyen en sus performances visceras de animales o cabezas y miembros de maniquíes, para un mayor impacto visual.
No os pido que lleguéis a tanto, pero creo que llevar con nosotros un espray para esas paraditas del cigarrito, hacer fotos o cuando la llamada de la naturaleza aprieta pueden ser otro empujón para que las protestas y las voces de los moteros lleguen a cuantos más oidos mejor. Es más, os propongo que fotografiéis vuestra "obra" y la subáis a Flickr con el tag "protestarte".
Así que ya sabéis...
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