Vaya fin de semana para Nicky Hayden... y en general menudo arranque de campeonato. Nada menos que duodécimo en Qatar, caída provocada en la primera vuelta en Motegi y una actuación bastante pobre sufrida en el Gran Premio de España en Jerez. Por si no le llegaba con recuperarse del toque de Japón, la Ducati se mostró ingobernable para él.
Y es que parece que se repite la doble historia del año pasado: la Ducati no parece funcionar si no pilota Casey Stoner, igual que curiosamente pasaba con la famosa Honda hecha para Dani Pedrosa. Si el año pasado era Marco Melandri quien las pasaba canutas hasta la desesperación, este año le toca a Hayden comulgar con ruedas de molino. Ojo, hablamos de la escuadra oficial.
Una de las razones de mayor peso es precisamente el descontrol que sufre el americano cuando el depósito está lleno hasta los topes. Pero hay más razones para que el de Kentucky no consiguiese más que un punto, décimo quinto finalmente que le debe saber a muy poquito al campeón del mundo de 2006.
Según sus propias declaraciones las deficiencias en Jerez fueron básicamente problemas de puesta a punto, y problemas físicos. Aparte de un error en la primera vuelta que le hizo perder alguna posición.
Estaba nervioso por si iba a ser una carrera dura físicamente, pero ha sido realmente peor de lo que esperábamos. Al principio sufrí mucho con la alta carga de combustible y cometí un error en la primera vuelta – intentaba adelantar alguna posición y terminé perdiendo varias. Traté de recuperar, pero algo iba mal con la puesta a punto de la moto. No puedo hacer que el compuesto duro funcione correctamente en mi moto y debo montar el blando, pero hoy tampoco me han funcionado bien ni esos hasta que les pude meter bastante calor. Mi mejor vuelta fue la 17, así que esto es algo que tenemos que trabajar definitivamente con el equipo. Debemos estudiar los datos y maquinar algo diferente para la próxima.
Los problemas físicos son comprensibles, dos caídas fuertes (una en entrenamientos en Qatar, otra en carrera por “lanzamiento de Takahashi”) deben dejar bastante tocado el físico, y un Gran Premio como el de este fin de semana agota al más pintado, cuanto más si estás molido.
El tema de puesta a punto es algo que hay que aceptar, pero que cuesta creer. Un piloto como Hayden declara que no puede conducir una Ducati ni siguiendo las indicaciones de Stoner, ni con la ayuda del equipo de ingenieros del equipo. Ya el año pasado Marco Melandri no era capaz de llevar la moto, rodaba en las últimas posiciones de manera habitual y era superado por las Ducati satélite. Igual que Hayden este año (Sete Gibernau consigue mejores resultados).
Así que, por segunda temporada consecutiva, Ducati hace la moto solo para Stoner, o bien Stoner es un fuera de serie absoluto, o bien la segunda moto está gafada. Ya me contaréis si no…