Andaba yo trasteando por la red cuando me he encontrado un vídeo que me ha dejado un poco ojiplático en el que podemos ver un propulsor de ocho cilindros en uve con mecánica de dos tiempos. Mientras pensaba si pudiera ser algo publicable dentro de Motorpasión Moto por la proveniencia nautica del engendro con bufandas hechas a mano y demás parafernalia me he encontrado con que sí que hubo una moto propulsada por un corazón así.
El artículo en cuestión lo he encontrado en Visor Down, donde nos cuentan de manera muy acertada cómo de unir dos Yamaha TZ750 para crear un monstruo para drag races de 1.500 centímetros cúbicos y ocho cilindros en uve. Recordemos que el motor de cuatro cilindros en línea original de las Yamaha TZ750 de carreras era capaz de erogar 141 cv y duplicaba su potencia en una franja muy estrecha del tacómetro.
Después de escribir éste escueto artículo sin nada de información y con tan sólo las tres fotos, alguien escribió al propio Mark Forsyth para contarle un poco más de la historia de aquellas imágenes en blanco y negro. La persona que se puso en contacto con él fue el mismo que hizo aquellas fotos quien le contó cómo a partir de dos bloques de Yamaha TZ750 un hombre llamado Roland Broadbent (actualmente en la división de motores de Prodrive) hizo un cárter a medida para que encajasen y cobraran vida como un único motor.
Las tres personas que aparecen en las fotos son Graham Dark (propietario), Eddie Yarker (vencedor del TT de la Isla de Mann con una Yamaha TZ750) y Roland Broadbent (constructor tanto del motor como del chasis). Finalmente problemas tanto de salud como familiares de Roland Broadbent obligaron a que Graham Dark perdiera interés en el proyecto y lo aparcase antes de que estuviera terminado sin nadie que materializase las ideas.
Por cierto, que el vídeo que me llevó a encontrar esa pequeña historia os lo dejo a continuación. Aunque no lleve dos ruedas y sea más acuático de lo que aquí estamos acostumbrados merece la pena que lo escuchéis.