Eso es lo que le preguntó el niño a su padre cuando lo pilló a medias con la transformación. La idea es buena, una bici y un taladro de baterías con una cadena directa al plato. Así conseguimos una especie de Moto Feber pero con muchisima mas fuerza. El tema de la velocidad no se como irá, ni la autonomía. Pero seguro que luego quedó súper satisfecho el crío al convertirse en el de la bici más molona de su barrio. En fin, la chorrada la encontró SandMan, gracias por compartirla.
Vía | English Russia