Diego Armando Maradona es leyenda de la pelota. El futbolista cumpliría ahora 64 años, y aunque ya no está con nosotros, su legado permanecerá muchas generaciones. Sin embargo, más allá de la pelota, Maradona también tenía cierta relación con las motos.
De hecho, en su garaje había dos motos. Una de ellas es única en el mundo, pues no existe una igual. Y la otra es un pequeño scooter japonés que nadie se puede hacer la idea de cuánto se ha revalorizado tras su muerte.
Un scooter y una Harley-Davidson muy especiales
Pero, ¿tenía Diego Maradona un Balón de Oro? Ahí va una efeméride futbolística. Sí, pero no. No llegó a conseguir nunca un Balon de Oro de France Football porque hasta 1995 solo podía premiar a futbolistas europeos. Su reconocimiento llegó con un Balón de Oro especial entregado en el mundial de México 1986. Y que por cierto, luego le robaron.
El caso es que durante su vida, Diego Armando Maradona tuvo dos motos en su garaje. La primera de ellas era muy sencillita. Era un scooter, un Honda Elite 250 que perteneció al astro argentino y que hace relativamente poco salió en subasta por 200.000 dólares.
No tenía nada de especial más allá de que perteneció a Maradona. De hecho, venía con el comprobante de que la moto pertenecía al astro argentino. Como curiosidad y reseña La Moto, el scooter fecha en marzo de 1993, año en el que Maradona jugaba con el Newell’s Old Boys de Rosario cuyo patrocinador principal era Yamaha.
Pero no era su única joya. Precisamente la segunda era una moto de las rudas, de las grandes, de las yanquis. Era la 'Yo soy el Diego', un apodo muy particular para una Harley-Davidson Fat Boy 107 preparada ex profeso para el jugador argentino. Y menuda moto.
Salta a la vista que es una preparación excesiva, hecha al dedillo. Está galardonada con todo lujo de detalles que escapan de lo que es una moto habitual... Y el ejemplo más claro lo vemos en la rueda delantera, donde un balón de oro cubre las llantas junto con el depósito acabado con los colores de la bandera argentina.
Y aquí viene otra curiosidad. La moto fue hecha por el club Dinamo Briest de Bielorrusia (del que fue presidente de honor). Esta Harley-Davidson personificada hasta los topes costó la friolera de entre 30.000 y 40.000 euros.