Le Mans fue un carrerón. Espectacular. Nos tuvo pegados a la silla de principio a fin. Motegi fue una buenísima carrera, pero lo de Le Mans fue un espectáculo completo. Desde la carrera de Laguna Seca’08 que no disfrutaba tanto. Reconozco que se siempre me había mostrado escéptico respecto a las carreras “bandera a bandera” y los cambios de moto. Las primeras experiencias no fueron para tirar cohetes y crecieron mis dudas. Pero en la carrera de Le Mans el cambio de motos durante la carrera mostró todo su potencial estratégico. Lo curioso es que ahora que nos han convencido a todos, plantean la moto única para el año que viene: ¿Cómo se va a hacer el cambio de motos con una moto por piloto?
Este año la lucha es a cuatro pilotos y los resultados de Le Mans han cerrado mucho las diferencias situándola en una pequeña diferencia de 9 puntos. Cuatro en un pañuelo. Esta temporada salir del podium se paga caro y la regularidad va a ser determinante. De momento, ya han tenido su “fiasco” Dani Pedrosa (en Qatar), Jorge Lorenzo (en Jerez) y Valentino Rossi (en Le Mans). Casey Stoner ha tenido un par de medios fallos, con lo cual el resultado es la clasificación apretada de estos momentos. Una temporada que se presenta apasionante. Ojalá las próximas carreras mantengan el nivel de Le Mans. Y ahora, las reflexiones post-carrera de Le Mans.
Lo mejor y lo peor de la carrera de MotoGP en Le Mans:
Lo mejor:
- Descomunal Jorge Lorenzo. No se puede ir más rápido del suelo (Jerez) al cielo (Le Mans). En esta ocasión Jorge Lorenzo estuvo inconmensurable en la que seguramente ha sido su mejor y más completa carrera. En mojado. En seco. En estrategia. Jorge Lorenzo y su equipo estuvieron intratables. Si mantiene el nivel, se postula como un firme candidato al título.
- Espectacular reacción final de Dani Pedrosa. Viendo el resultado de Melandri, que paro a repostar justo después de Dani, se puede pensar que Dani perdió la segunda posición con su actitud conservadora tras ver la caída de Rossi. Pero Dani mostró talento, valor y casta para subirse al podium, recordando las jerarquías en el equipo HRC con el contundente adelantamiento a Dovizioso en la última vuelta. Solamente había que ver lo exultante que estaba al acabar la carrera en el corralito, explicando emocionado y dicharachero su carrera.
- La increible segunda posición de Marco Melandri. Creo que todo el mundo se alegró por Marco y su negra Kawasaki, perdón Hayate, después de lo que ha pasado el bravo piloto italiano este año. Viendo lo de Honda en f1 y Kawasaki en MotoGP creo que son más bien peculiares las estrategías de los japoneses al abandonar categorías de competición. Lo mejor es que el caso de Marco no es flor de un día extraño, sino que ya venía varias carreras dando señales de su buen rendimiento. ¡Qué lejos le queda lo que vivió en Ducati el año pasado!.
- Los cambios de moto. Fue curioso porqué sucedió al revés de lo habitual: dejar las motos con ruedas de mojado y coger las de seco. Fue interesante poder comprobar las estrategias y los diferentes momentos escogidos por cada piloto para el cambio de moto. También quedo claro en los boxes que no se han hecho demasiados ensayos del cambio de moto: cada uno paraba donde le parecía e incluso hubo algún piloto que chocó con sus mecánicos al cambiar de moto: ¿alguien se fijo quien era?
- Las pocas caídas que hubieron en MotoGP. De hecho creo que hubo solamente la de Rossi. He dudado mucho sobre si poner este punto en lo mejor o lo peor. Pero me dolía poner como peor que apenas hubo caídas en MotoGP. Una simple comparación con las carreras que vimos en 125 y 250, donde la mitad de la parrilla se fue al suelo, muestra la importancia decisiva del control de tracción en mantener las motos sobre la pista, evitando derrapadas, sustos y patinazos. Vivimos en la era de la electrónica.
Lo peor:
- Aciago día de Valentino Rossi. La carrera de Rossi fue digna de un número 13. Le paso de todo, y el resultado fueron tres cambios de moto y un paso por boxes como penalización por un error infantil que solamente él cometió: exceso de velocidad en boxes. Y ello el día en que los compañeros del otro lado del muro hicieron una carrera perfecta duele más. Pero tuvo el pundonor y el coraje de seguir en pista para pelear por pillar algún punto, que al final no consiguió.
- Gris Casey Stoner. Lo intentó pero no pudo. Y ya van varias carreras en las que no acaba de encontrarse a gusto sobre la moto. Las carreras van pasando y necesita ser capaz de poner a punto la Ducati para las carreras.
- La caída de Sete Gibernau. La temporada está siendo muy diferente de lo que esperaba Sete. De nuevo la clavícula izquierda rota, aunque afortunadamente por un sitio diferente. A ver si remonta la temporada, que es lo que todos deseamos.
- El conformismo de Dovizioso. Quizás Pedrosa era imparable por qué venía con determinación a subirse al podium. Pero personalmente, esperaba más pelea de Dovizioso por mantener la tercera posición, teniendo en cuenta que es su compañero de equipo y quizás se jugaba algo más que la tercera posición.
Foto | Web oficial MotoGP