No han pasado ni dos semanas después de que el Campeonato del Mundo de MotoGP haya comenzado en Catar y ya están volando las polémicas. Además de los rumores de qué pasará con el cotizadísimo Johann Zarco de cara a 2019, Cal Crutchlow ha incendiado las redes sociales al reclamar un mayor control sobre los análisis antidopaje.
El piloto británico ha sido tan contundente como de costumbre en unas recientes declaraciones al medio crash.net. En opinión del dorsal 35 "sería estúpido pensar que en el mayor exponente del motociclismo no hay gente que intente hacer trampas".
"No se hacen más test porque la gente o no quiere o es muy vaga"
Para Crutchlow la solución pasa por hacer exámenes con una mayor frecuencia. "Actualmente los test son terribles, en este campeonato no se están haciendo como deberían y es algo que se lleva hablando desde hace cuatro años", aseguraba el piloto del LCR Honda. "Los test son una mierda, no se puede elegir aleatoriamente a tres pilotos".
Crutchlow se refiere a esta aleatoriedad como un problema porque esos tres pilotos pueden volver a salir para el siguiente test, o no salir nunca, creando un muestreo irregular en los exámenes. "Un año me tocó hacer el test dos veces; después de eso he estado dos años sin que me toque. A Jack Miller en tres años le han examindo dos veces", señalaba el inglés.
Para el pupilo de Lucio Cecchinello la solución es que todo el mundo pase por las rotaciones de manera regular, informando cada día dónde van a estar para que se les pueda efectuar el examen. "Todos los pilotos deberían declarar su paradero a diario para que se les pudieran realizar los exámenes, pero el problema es que son muy vagos y no quieren tener que loggearse en el sistema ADAMS todos los días", concluía Cal.
Las reclamaciones de Crutchlow han sido respaldadas por un grupo de pilotos, mientras que otros simplemente han guardado silencio, "o bien porque no quieren más test o porque no quieren tener un seguimiento más exhaustivo de lo que hacen".
El británico ha ido aún más lejos al afirmar que cuando se refiere a estos controles es porque efectivamente existe un dopaje, aunque no mediante drogas que potencien el rendimiento físico puesto que eso no es determinante en el motociclismo. "Me refiero a formas de deshidratación y rehidratación no permitidas", vías rápidas de perder peso a través de diuréticos antes de salir a pista o inyecciones para recuperar la hidratación después de una carrera.
Carmelo Ezpeleta, CEO de Dorna, aseguró que desde hace años llevan trabajando en educar a los pilotos puesto que es un asunto que concierne tanto a ellos como a la FIM. "A medida que el motociclismo ha crecido como deporte también se ha incrementado el aspecto físico en todas las categorías, por eso debemos concienciar a los pilotos contra el dopaje tanto dentro como fuera de los circuitos", apuntó.